Oficialismo y oposición alcanzan acuerdo para definir en plebiscito si los chilenos quieren una Nueva Constitución

Se fijó un mecanismo y un alto quórum para sus artículos en el caso que el Sí gane en abril próximo.

El presidente del Senado, Jaime Quintana, dio a conocer a las 2.24 de la madrugada, tras una maratónica negociación, el acuerdo final entre oficialistas y opositores llamado «Por la Paz Social y una Nueva Constitución».

El acuerdo contempla un plebiscito de entrada que le pregunte a la ciudadanía si quiere o no cambiar la Constitución y por qué mecanismo se inclinaría para su elaboración: Convención Constitucional (100 por ciento elegida) o Convención mixta Constitucional (conformada en un 50 por ciento por parlamentarios y un 50 por ciento de delegados electos para tal fin).

La reunión, que consideró a líderes de todos los partidos, se alargó más de lo esperado por la resistencia de la UDI, primero a la Asamblea Constituyente, luego por tratar de imponer un quorum alto para la aprobación de cada artículo y finalmente, además, por negarse a que se partiera de cero, exigiendo que si los textos no obtenían los dos tercios, se mantenían los actuales de la Constitución de 1980.

Tampoco el acuerdo contó con el apoyo del PC, colectividad que se retiró muy temprano, cuando la derecha propuso una convención constituyente integrada por parlamentarios (40%), expertos (20%) y miembros elegidos (40%). Dos parlamentarios del FA, uno de ellos Pamela Jiles, también se restó del acuerdo.

De ganar el Sí en el plebiscito de abril, la carta fundamental que se elaboraría partiría de cero, caducando la actual Constitución, creada en 1980 durante la dictadura cívico-militar. Este punto fue el que demoró la firma..

La Convención, cualquiera sea el mecanismo que se apruebe (Mixta o no), funcionará únicamente para redactar la Constitución y luego se disolverá. Sus miembros, cualquiera sea el órgano, serán elegidos en octubre próximo, conjuntamente con alcaldes, concejales y gobernadores provinciales. No podrán participar de las primeras elecciones que ocurra después que se apruebe la nueva Constitución.

Serán materias de leyes orgánicas, decía el preacuerdo, pero no el definitivo, el tamaño de ambas opciones, las inhabilidades y la prohibición de postulación a los delegados a las próxima elecciones, la obligatoriedad del voto en el Plebiscito (que sería solo para el de salida), el sistema de elección (que debe ser proporcional), los mecanismos para alcanzar la paridad de género y de inclusión de pueblos originarios, los tiempos de trabajo establecido (nueve meses) y sus prórrogas (máximo 3 meses), la forma de ratificación (plebiscito por mayoría absoluta) y el mecanismo de participación ciudadana.

El miércoles pasado la oposición unida había propuesta el trayecto de Plebiscito, Asamblea Constituyente y Nueva Constitución. El gobierno, sin embargo, rechazó las primeras dos opciones, abriéndose solo a la redacción de una Carta Magna. Luego, cedió.

pdf Acuerdo por la Paz Social y la Nueva constitucion (1)

 

 

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El Periodista