
Los diputados de Renovación Nacional que integran la Comisión de Trabajo de la Cámara, Ximena Ossandón, Frank Sauerbaum y Mauro González, manifestaron su preocupación y emplazaron directamente a la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, a renunciar a la brevedad, luego de que el Partido Comunista eligiera su nombre como carta presidencial con miras a las próximas elecciones.
Si bien Jara aún no ha sido proclamada, hasta que deje el cargo, ayer Lautaro Carmona informó que el pleno del Comité Central la había escogido como la candidata del PC.
Desde RN aseguran que mantener a una ministra en ejercicio como precandidata presidencial no solo compromete la necesaria imparcialidad de su cargo, sino que además erosiona la fe pública en un ministerio que debe garantizar ecuanimidad en temas tan sensibles como el sistema de pensiones, la seguridad laboral y los derechos de los trabajadores.
El diputado Frank Sauerbaum advirtió que “es impresentable que la ministra Jara continúe en el cargo mientras su nombre es promovido políticamente para la presidencia. Ya hemos visto cómo ha utilizado su rol para recorrer el país, disfrazando actividades proselitistas como difusión de políticas públicas. Esto no es compatible con un mínimo estándar de transparencia”.
Por su parte, la diputada Ximena Ossandón afirmó que “si la ministra Jara quiere ser candidata, que lo haga desde el mismo punto de partida que cualquier ciudadano, no desde el escritorio del Ministerio del Trabajo. Sería inaceptable que el gobierno permitiera que se sigan confundiendo los límites entre el rol público y los intereses partidistas”.
Finalmente, el diputado Mauro González enfatizó que “el anuncio del PC no hace más que confirmar lo que venimos advirtiendo hace meses: la ministra ha ocupado su cargo para posicionarse políticamente. Si hay un mínimo respeto por los chilenos, debe dar un paso al costado de inmediato”.
Los parlamentarios recordaron que esta no es la primera vez que exigen su salida, puesto que ya se ha señalado cómo ha instrumentalizado sus funciones para impulsar la reforma previsional del Ejecutivo, cuando incluso recurrieron a Contraloría.
“Una ministra candidata no puede representar con objetividad ni a los trabajadores ni al país”, sentenciaron.