
Aumentan a 27 los muertos por incendios forestales en Corea del Sur
El Cuerpo de Bomberos, que se ha topado con serias dificultades sobre el terreno debido al clima seco y la presencia de fuertes ráfagas de viento, ha indicado que la situación sigue siendo compleja en las provincias de Gyeongsang del Norte y Gyeongsang del Sur, las más afectadas.
Al menos 27 personas han muerto y otras 32 han resultado heridas a causa de los incendios forestales registrados en el sureste de Corea del Sur, que sigue bajo estado de catástrofe a nivel nacional a medida que los bomberos tratan de sofocar las llamas.
El Cuerpo de Bomberos, que se ha topado con serias dificultades sobre el terreno debido al clima seco y la presencia de fuertes ráfagas de viento, ha indicado que la situación sigue siendo compleja en las provincias de Gyeongsang del Norte y Gyeongsang del Sur, las más afectadas.
Así, han informado de que unas 36.000 hectáreas se han visto calcinadas, lo que supone unas 13.000 hectáreas más de las que se vieron gravemente afectadas en el año 2000 cuando tuvieron lugar los virulentos incendios de la zona costera del país y que eran, hasta la fecha, los peores registrados en la historia de Corea del Sur.
Ahora, unas 37.000 personas siguen evacuadas, 29.911 de ellas en Uiseong, que registra el mayor número de muertos. El presidente en funciones del país, Han Duck Soo, ha ordenado al ministro del Interior, Ko Ki Dong, que supervise los trabajos de extinción y dé apoyo a las víctimas.
«Es preocupante que muchos de los fallecidos sean personas mayores, entre ellos pacientes de hospitales e internos en centros de día», ha lamentado Han, según informaciones recogidas por la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
Los incendios comenzaron hace ya cinco días en las inmediaciones de Uiseong y, desde entonces, han avanzado hacia Andong, Cheongsong, Yeongyang y Yeongdeok. Las llamas han obligado al Ministerio de Justicia a trasladar a cerca de 500 presos de una cárcel en la provincia de Gyeongsang del Norte a otros centros penitenciarios del país, si bien en un inicio se estimaba que la medida pudiera afectar a unos 3.500 reos.