Justicia israelí ordena detención de más de un millar de judíos ortodoxos
El jefe de la Dirección de Planificación y Personal del Ejército israelí, Shay Tayeb, ha declarado que solo 461 de los 3.000 judíos ultraortodoxos de edades comprendidas entre los 18 y 26 años que recibieron órdenes para sumarse a las filas de las Fuerzas Armadas se han presentado en los centros dispuestos para el reclutamiento.
La Justicia de Israel ha ordenado este lunes detener a más de un millar de judíos ortodoxos que se han negado a ser reclutados en el marco de la ofensiva contra la Franja de Gaza, una medida que ha suscitado numerosas protestas entre miembros de la comunidad haredí, que insisten en quedar al margen del servicio militar obligatorio.
El jefe de la Dirección de Planificación y Personal del Ejército israelí, Shay Tayeb, ha indicado durante una comparecencia ante el Parlamento que solo 461 de los 3.000 judíos ultraortodoxos de edades comprendidas entre los 18 y 26 años que recibieron órdenes para sumarse a las filas de las Fuerzas Armadas se han presentado en los centros dispuestos para el reclutamiento.
Así, un total de 1.212 miembros de dicha comunidad podrían ser ahora arrestados por haber ignorado las órdenes del Ejército emitidas durante el pasado verano. En este sentido, ha asegurado ante la Comisión de Asuntos Exteriores y Defensa de la Knesset que son también más de un millar los que no podrán abandonar el país, según informaciones recogidas por el diario ‘The Times of Israel’.
Por su parte, los líderes religiosos y políticos haredíes se resisten a cualquier intento de reclutar a los jóvenes debido a su condición de estudiantes de las escuelas talmúdicas.
Los socios de coalición ultraortodoxos del primer ministro, Benjamin Netanyahu, han ejercido presión sobre el Gobierno para que se apruebe una ley que regule las exenciones militares para los estudiantes de la yeshiva y otros miembros de la comunidad haredí después de que el Tribunal Superior dictaminara en junio que estas exenciones, vigentes durante décadas, eran ilegales.
Los partidos Judaísmo Unido de la Torá y Shas han acusado tanto al Gobierno como a la fiscal general del país, Gali Baharav Miara, de obstaculizar un proyecto de ley que consagre la exención del servicio militar para los haredíes.