Gobierno alemán acusa a Musk de intentar influir en las elecciones
"Lo que Elon Musk trata de hacer a través de sus comentarios es influir en la campaña electoral", ha indicado la portavoz adjunta del Gobierno, Christiane Hoffmann, agregando que si bien es libre de expresar sus opiniones las elecciones son un asunto de los alemanes.
El Gobierno alemán ha acusado este lunes al magnate Elon Musk, propietario de la red social X, de intentar influir en las elecciones anticipadas de febrero tras mostrar su apoyo al partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD).
«Lo que Elon Musk trata de hacer a través de sus comentarios es influir en la campaña electoral», ha indicado la portavoz adjunta del Gobierno, Christiane Hoffmann, agregando que si bien es libre de expresar sus opiniones las elecciones son un asunto de los alemanes.
El canciller alemán, Olaf Scholz, ya afirmó el viernes que la libertad de expresión es «válida» para los «multimillonarios», si bien aseguró que «se pueden decir cosas que no son correctas y que no contienen buenos consejos políticos».
Esto se produce después de que el magnate afirmase en la red social X, de la que es propietario, que «solo la AfD puede salvar Alemania», a lo que una de las líderes de la formación ultraderechista, Alice Weidel, respondió que «tiene toda la razón».
Además, el semanario ‘Welt’ publicó durante el fin de semana un artículo invitado en el que el magnate se reafirmaba en su postura sobre la AfD. La jefa de opinión del diario, Eva Marie Kogel, presentó su dimisión en señal de protesta.
El presidente de la Unión Demócrata Cristiana (CDU), Fredrich Merz, también criticó a Musk por expresar sus preferencias para las elecciones alemanas en redes sociales. «No recuerdo un caso comparable de injerencia en la campaña electoral de un país amigo en la historia de las democracias occidentales», dijo.
Alemania celebrará elecciones parlamentarias el 23 de febrero y la AfD figura en la mayoría de los sondeos en segunda posición, sólo por detrás del bloque conservador que lidera la CDU U). Sin embargo, el cordón sanitario impuesto por todos los partidos sobre la ultraderecha complica que la AfD pueda terminar gobernando, como quedó demostrado en los comicios regionales de Sajonia y Turingia.