Piden renuncia de Blinken por venta de armas a Israel
"Blinken ha seguido mintiendo al Congreso y debería renunciar. La ley estadounidense es muy clara: ninguna nación que bloquee la ayuda humanitaria estadounidense puede recibir armas estadounidenses", ha declarado ante la Cámara de Representantes, la congresista demócrata Rashida Tlaib.
La congresista demócrata Rashida Tlaib ha pedido este jueves la dimisión del secretario del Departamento de Estado estadounisense, Antony Blinken, por incumplir la ley al vender armas a Israel, mientras bloquea la entrada de ayuda humanitaria estadounidense en la Franja de Gaza.
«Blinken ha seguido mintiendo al Congreso y debería renunciar. La ley estadounidense es muy clara: ninguna nación que bloquee la ayuda humanitaria estadounidense puede recibir armas estadounidenses», ha declarado ante la Cámara de Representantes.
Tlaib ha acusado al secretario de Estado de «mentir» cuando dijo que «no habría cambiado ninguna política, a pesar de admitir que el Gobierno israelí todavía ha fallado en cumplir con todas sus exigencias».
Además, ha señalado al Ejecutivo estadounidense por negarse a cumplir con la legalidad estadounidense mientras «los niños palestinos se ven obligados a comer comida para mascotas y harina infestada de insectos».
«La administración Biden no puede elegir cuándo se cumplen con nuestras propias leyes. Miren esto y no devuelvan su espalda en ser cómplices con este crimen de guerra», ha dicho al tiempo que ha mostrado una fotografía de un niño palestino en estado claro de desnutrición. «Pero Blinken dice que no hay necesidad de cambiar nuestra propia política», ha sentenciado la congresista demócrata.
Naciones Unidas alertó la semana pasada del grave riesgo de hambruna al que se enfrenta la población del norte de la Franja de Gaza justo cuando se cumplían 400 días de conflicto. Según un informe de seguridad alimentaria publicado a mediados de octubre, el 91 por ciento de la población en todo el enclave palestino tiene problemas para subsistir.
En concreto, según este estudio, elaborado por 16 agencias de la ONU y ONG, 1,95 millones de personas sufrirán inseguridad alimentaria en los próximos meses, con 345.000 de ellas dentro de lo que se entiende como nivel de «catástrofe», el más preocupante de todos. (Europa Press)