Bolivia y Chile se reúnen en un comité de fronteras para hacer frente al contrabando

Según cifras de la Cámara Nacional de Industrias de Bolivia (CNI), el contrabando mueve unos 3.500 millones de dólares en el país, un monto que equivale a un 6,7 por ciento del producto interno bruto (PIB).

Autoridades de Bolivia y Chile se reúnen en el XVI comité de fronteras en la ciudad de La Paz para coordinar acciones conjuntas contra el contrabando y otros delitos transnacionales, informó este jueves el Ministerio de Defensa del país altiplánico.

«La XVI Reunión del Comité de Fronteras e Integración Bolivia-Chile es realizado en predios de la Cancillería del Estado Plurinacional de Bolivia, con objeto de planificar una coordinación internacional para tratar temas de interés binacional en la lucha contra el contrabando en la línea de fronteras para la próxima gestión», se lee en la nota de prensa.

De la cita participan representantes bolivianos de la Aduana Nacional, el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) y el Comando Estratégico Operacional de Lucha Contra el Contrabando (CEO-LCC) y, por parte de Chile, autoridades de Carabineros  y de la Aduana.

«Entre los compromisos se encuentran: establecer intercambio de comunicación para realizar operativos de lucha contra el contrabando en base a rutas ilegales o clandestinas (jurisdicción de la localidad de Tambo Quemado); la ejecución de operativos conjuntos o por separado en la lucha contra el contrabando; y medidas de prevención y concientización en la frontera», se detalló.

Las organizaciones criminales transnacionales encontraron terreno fértil en la frontera entre Chile y Bolivia debido a que existe poca coordinación entre los Gobiernos de ambos países desde la Guerra del Pacífico (1879), cuando el país altiplánico perdió su acceso soberano al Océano Pacífico.

Según cifras de la Cámara Nacional de Industrias de Bolivia (CNI), el contrabando mueve unos 3.500 millones de dólares en el país, un monto que equivale a un 6,7 por ciento del producto interno bruto (PIB).

Tan solo por la evasión de impuestos aduaneros, esa actividad criminal genera pérdidas de alrededor de 600 millones de dólares a la economía boliviana.

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El Periodista