Contraloría: gobierno eleva al Senado nombre de Dorothy Pérez

La abogada de la Universidad de Chile, quien debe ser ratificada por la cámara alta, era contralora subrogante desde 2023. Estuvo casi un año con licencia médica cuando se enfrentó internamente al excontralor Ramiro Mendoza. También tuvo problemas con Jorge Bermudez.

El Presidente Gabriel Boric propuso al Senado a la abogada Dorothy Pérez Gutiérrez como Contralora General de la República, quien actualmente se desempeña en ese cargo como subrogante.

Dorothy Pérez Gutiérrez es abogada especializada en Derecho Administrativo, Control Público y Fiscalización; diplomada en Derecho Administrativo Económico, en Derecho e Inteligencia Artificial y en Prevención, Detección e Investigación de Fraude; además es magíster en Gestión y Control y en Gerencia y Políticas Públicas.

El gobierno sostuvo «la abogada se desempeña actualmente como Contralora General (s) de la República, mientras que, entre septiembre de 2016 y diciembre de 2023 ocupó el cargo de Subcontralora General».

«En el organismo ha sido Contralora Regional de Valparaíso; subjefa de la División de Auditoría Administrativa; jefa de Comité en la División Jurídica; y Jefa de Gabinete del Contralor General de la República, entre otros», enfatizaron.

Su carrera en la institución, donde ingresó en 2007, no ha estado exenta de polémicas, especialmente  por su enfrentamiento con el excontralor Ramiro Mendoza, quien trató de sacarla -sin éxito- de la subjefatura de la División de Auditoría Administrativa. A raíz de ello presentó una licencia por problemas de salud mental que duró casi nueve meses.

«Esta situación culminó en una investigación por acoso laboral, reflejando un entorno de trabajo hostil que la llevó a dejar la Contraloría y asumir como jefa de la División Jurídica del Ministerio de Educación bajo la gestión de Nicolás Eyzaguirre» señaló Biobío.

El regreso de Pérez a la Contraloría se produjo en enero de 2016, cuando el nuevo contralor, Jorge Bermúdez la nombró jefa de gabinete y, posteriormente, subcontralora. Sin embargo, su relación con este se fracturó en 2018, cuando le solicitó la renuncia, un conflicto que terminó en la Corte Suprema, a favor de Pérez.

En su primer día en el cargo como contralora subrogante, tras la salida de Bermúdez, implementó una reestructuración que incluyó la eliminación de seis jefaturas y la creación de una división especial para combatir la corrupción en municipalidades y gobiernos regionales.

Su vínculo con la política ha sido un aspecto controversial. En 2023, se reveló que Pérez había visitado a Luis Angulo, un operador político del PPD, en el contexto de investigaciones relacionadas con supuestos pagos de coimas, señala Biobío.

Aunque Pérez defendió la visita como una “tertulia” social, las implicaciones han alimentado un clima de desconfianza en torno a su figura.

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