Catalina San Martín «ordenará la casa» en Las Condes
Por Patricio Herman, presidente Fundación Defendamos la Ciudad
En un amplio terreno fiscal tipificado como área verde en el Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS) y en el Plan Regulador Comunal (PRC) de Las Condes, localizado en la esquina de las vías Américo Vespucio Norte, Cerro Colorado y Alonso de Córdova, funcionaron durante unos cuantos años 22 canchas de tenis explotadas por unos particulares, ello a través de una concesión gratuita por 15 años, entregada sin licitación pública a ellos por la dictadura de Pinochet con la única contraprestación de que construyeran dichas canchas.
Al término de la misma, como esos concesionarios, ya en democracia, en atención a que el negocio era muy lucrativo. se negaban sistemáticamente a devolver el terreno al Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu) Metropolitano, fue necesario que el gobierno iniciara acciones judiciales, las que tuvieron éxito en la Corte Suprema, gracias a la mano conductora del abogado René Abeliuk (QEPD).
Cuando el Estado pudo recuperar el predio, con rol 907-25 del Servicio de Impuestos Internos (SII), con la totalidad de sus canchas de tenis operativas, el Serviu Metropolitano se lo entregó en comodato a la Federación de Tenis de Chile para que sus canchas fueran ocupadas en sus actividades propias, pero como su utilización no era la correcta, entre otras cosas, se eliminaron algunas de ellas para dar paso a actividades mercantiles más lucrativas, el Serviu Metropolitano con fecha 23 de diciembre de 2015 puso término anticipado al contrato, sin que produjera efecto.
Tiempo después, Cristián Monckeberg, titular el Minvu, en conjunto con Joaquín Lavín, alcalde de Las Condes, se pusieron de acuerdo para construir en ese terreno urbano unos cuantos edificios de departamentos orientados a familias de escasos recursos, interesante proyecto de bien público que, por distintas razones, todas imputables a la municipalidad, nunca prosperó y no tiene sentido dar a conocer los motivos por los cuales fracasó esa excelente idea de ambas autoridades.
El actual gobierno de Boric tomó el toro por las astas, dentro de la política pública llamada Plan de Emergencia Habitacional, y decidió tiempo atrás edificar allí 2 edificios para familias vulnerables que tengan acceso a los subsidios del Minvu, conformando un espectacular parque. Para tal propósito la municipalidad de Las Condes debía notificar a la Federación de Tenis de Chile que restituyera el terreno al Serviu a fines de mayo de 2024, lo que se incumplió, por lo tanto lesionándose las confianzas suscritas en un formal convenio. Se debe tener presente que ambas partes -Minvu y municipalidad- habían declarado que la integración social es una necesidad impostergable, recordándose que en nuestro país hay 700.000 familias que carecen de una vivienda digna.
Así las cosas, dado que este indispensable proyecto del gobierno entregará una solución concreta, en un par de años más, para 340 familias necesitadas, las que dispondrán de sus hogares en esos 2 edificios en altura, rodeados de magníficas áreas verdes consolidadas y otros servicios comunitarios, nos preocupa sobremanera que se siga postergando la devolución del predio, por parte de la municipalidad de Las Condes al Minvu.
Respetándose los compromisos formales entre el Minvu y la municipalidad de Las Condes, el traspaso del terreno al Serviu Metropolitando se debe realizar a la brevedad y por ello, como consecuencia del resultado de la votación del pasado 27 de octubre, podríamos entender que la electa alcaldesa, Catalina San Martín, le comunicará formalmente a la alcaldesa en funciones, Daniela Peñaloza, que es injustificable la dilación en comento, más todavía si se sabe que la Seremi Minvu, Carolina Casanova, ya ha comunicado a todos los medios de prensa que ejercerá acciones judiciales en contra de dicha municipalidad si no retorna ese predio fiscal a su legítimo propietario.
Catalina San Martín es una joven abogada proba y transparente quien, mientras ejercía como concejal, demostró en los hechos que no aceptaba la corrupción y por ello, ahora como alcaldesa, con todo el poder que le entrega el cargo, continuará combatiendo las malas prácticas en ese municipio, razón más que suficiente para esperar que el terreno en cuestión será restituido en breve plazo al gobierno central, para que allí se construyan esos 2 edificios en altura que tendrán 340 departamentos que ocuparán familias que carecen de capacidad de pago para obtener créditos hipotecarios de la banca.