Industriales de Antofagasta y caso Colbún: “La decisión del SEA genera incertidumbre y frena inversiones clave en la región”

Según el gerente general de la AIA, Fernando Cortez, el accionar del SEA Regional frente al proyecto Paposo, en Taltal, no tuvo a la vista el positivo impacto que tiene en la economía nacional.

La suspensión del proyecto Central Bombeo Paposo ha generado un fuerte debate en torno al futuro de las inversiones en energías renovables en la Región de Antofagasta.

La decisión del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de rechazar la iniciativa -que contaba con una inversión de US$ 1.400 millones- ha alarmado a sectores empresariales y gubernamentales.

El gerente general de la Asociación de Industriales de Antofagasta (AIA), Fernando Cortez, expone su visión sobre el impacto de esta decisión y lo que está en juego para la región y el país. En esta entrevista, aborda los desafíos que enfrentan las inversiones en energía y las señales contradictorias que emite el sistema de permisos ambientales.

Cortez subraya la importancia de la Región de Antofagasta como el segundo mayor generador de PIB de Chile. “Esta región es un motor económico clave, especialmente en sectores como la minería -con el cobre y el litio-, el sistema portuario, los recursos hídricos y las energías renovables”, explica. Sin embargo, advierte que la reciente decisión del SEA, que terminó con la suspensión del proyecto de Colbún, es preocupante “si bien no creo que ponga en tela de juicio el desarrollo futuro de la Región de Antofagasta, es una noticia perjudicial que tenemos que revertir a la brevedad”.

“Nos parece muy grave la decisión tomada por el Servicio de Evaluación Ambiental, ya que terminó por forzar a la empresa a suspender este proyecto estratégico, tanto para el país como para Antofagasta. Se trata de una inversión muy relevante, con un impacto significativo no solo en la generación de empleo, sino también en la creación de encadenamientos productivos”, asegura Cortez.

¿Cómo se ha recibido en la región esta noticia? ¿Hay temor por lo que pueda ocurrir con otros proyectos de energías renovables?

La decisión del SEA genera incertidumbre y frena inversiones claves en la región. Se recibe con profunda inquietud y preocupación: claramente es una noticia que genera incertidumbre, incertezas, dudas, exactamente lo contrario a lo que necesitamos para atraer y concretar inversiones. Para la comuna de Taltal, en particular, es un golpe muy fuerte, ya que Colbún ha demostrado tener una política de sustentabilidad y vinculación comunitaria muy robusta. Esperamos que esto se pueda revertir a la brevedad y que el proyecto pueda retomar su hoja de ruta.

“No basta con la salida del director regional”

En el marco de esta polémica, el ministro de Hacienda, Mario Marcel señaló: “Hay funcionarios que a veces se les pasa un poco la mano”, comentó el ministro de Hacienda, Mario Marcel. ¿Qué opina?

Estoy absolutamente de acuerdo con el ministro. Esta decisión del SEA regional claramente no está en línea con las prioridades que ha establecido el Gobierno en los últimos meses en orden, por ejemplo, de crear un gabinete pro-inversión -que lidera el ministro de Economía- para buscar y crear medidas para facilitar la concreción de proyectos de inversión que el país tanto requiere, dada la baja tasa de crecimiento proyectada para los próximos años. Este tipo de decisiones van en sentido contrario a esos esfuerzos.

¿Cómo se tomó en la región la salida del director regional del SEA, solicitada por la directora nacional Valentina Durán?

Somos respetuosos de las decisiones de la autoridad y si la directora nacional tomó esta decisión, será porque lo hecho no ha respondido a las prioridades políticas establecidas ni por el Gobierno, en general, ni por el Servicio de Evaluación Ambiental. Creemos que la salida del director responde a una falta de alineamiento con la prioridad nacional. Esperamos que la decisión política del Gobierno vaya más allá, porque no basta solo con la salida del director regional, sino que deben venir todas las medidas necesarias para retomar el curso del proyecto.

¿A qué atribuye tanta diferencia entre lo que señaló el SEA y lo que dijo la compañía, que sí había entregado las informaciones oportunas y pertinentes en el EIA?

A veces en estas materias, siguiendo con la declaración del ministro de Hacienda, no se tiene la debida consideración respecto del impacto que este tipo de proyectos tiene en la economía nacional y, particularmente, en la economía regional. A veces, se usan criterios que sobre ponderan determinadas variables como para tomar decisiones que afectan gravemente un proyecto tan significativo. Yo creo que aquí hubo una falta de criterio a la hora de ponderar adecuadamente lo que el Servicio estimaba que faltaba al proyecto o que debía complementar. Al respecto, la compañía estaba absolutamente dispuesta, y lo manifestó al Servicio, de ir complementando toda la información que se requiriera, pero sin que esto significara el rechazo. Es decir, no se ponderó de manera virtuosa el cumplimiento de la ley y la información necesaria con el avance del proyecto.

¿Cuán dañina es esta noticia para la competitividad económica de la Región de Antofagasta? ¿Se están poniendo en riesgo las inversiones debido a la permisología ambiental?

Nuestra región es el motor económico de la economía chilena y debemos asegurarnos de que este motor funcione de la manera más eficiente, aceitándolo, potenciando aún más su capacidad para atraer inversiones, en todo lo que tiene que ver con el cluster minero, energético y portuario. Es una mala noticia pero, ojalá, a la luz de la decisión que tomó la directora nacional del Servicio, podamos corregir esta situación y garantizar que se reestablezcan las certezas para asegurar las futuras inversiones en la región.

¿Qué mensaje le daría al Gobierno y a los inversionistas que están observando lo que ocurre en la región?

El mensaje es claro: necesitamos crear condiciones habilitantes para garantizar las inversiones que la región y el país requieren. No basta con remover funcionarios, el Gobierno debe implementar medidas que generen certidumbre y permitan retomar proyectos estratégicos como el de Paposo. La Región de Antofagasta tiene el potencial de seguir siendo el motor de Chile, pero para eso necesitamos un entorno de inversión estable y predecible.

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