EEUU critica «evitables» ataques de Israel contra instalaciones civiles en Gaza
Thomas-Greenfield ha criticado además al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) por "usar lugares civiles para llevar a cabo operaciones y suponer una amenaza". "No hay una prueba más clara de la total indiferencia de Hamás por los civiles palestinos en Gaza", ha declarado.
La representante permanente de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, ha criticado los «evitables» ataques perpetrados por el Ejército de Israel contra instalaciones civiles en la Franja de Gaza y ha recalcado que «no hay motivo» para que abra fuego contra vehículos de la ONU, algo que «ha pasado en numerosas ocasiones».
Thomas-Greenfield ha apuntado que «durante las últimas semanas ha habido numerosos ataques en los que personal de la ONU y trabajadores humanitarios han muerto o resultado heridos» y ha hecho hincapié en que «muchos de estos incidentes eran evitables».
Además, ha manifestado que la situación en Gaza es «catastrófica» y ha añadido que «los niños están muriendo, sufriendo enfermedades prevenibles y perdiendo sus clases en la escuela». «Miles han perdido a sus padres, a familiares, profesores y amigos, y tienen las cicatrices físicas y psicológicas que lo demuestran», ha lamentado.
«Seguiremos planteando la necesidad de que Israel facilite las operaciones humanitarias y proteja a los trabajadores y las instalaciones humanitarias, como la escuela de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) que fue atacada por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) la semana pasada en Nuseirat», ha apuntado.
En este sentido, ha recalcado que Washington ha sido «inequívoco» en sus conversaciones con las autoridades israelíes sobre que «no hay motivo, absolutamente ninguno, para que sus fuerzas abran fuego contra vehículos de la ONU claramente identificados, como ha ocurrido en numerosas ocasiones recientemente».
«Las FDI son un ejército profesional y saben muy bien cómo garantizar que incidentes como estos no ocurran. Por eso, Estados Unidos espera que sus líderes implementen cambios fundamentales en su forma de operar, incluidos cambios en sus reglas de combate y medidas para corregir las deficiencias obvias en la forma en que se implementan los procedimientos de desconflicto», ha argumentado.
Thomas-Greenfield ha criticado además al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) por «usar lugares civiles para llevar a cabo operaciones y suponer una amenaza». «No hay una prueba más clara de la total indiferencia de Hamás por los civiles palestinos en Gaza», ha criticado.
Por ello, ha apuntado nuevamente a la «urgencia» de lograr un acuerdo de alto el fuego que incluya la liberación de los israelíes secuestrados durante los ataques del 7 de octubre de 2023 y ha argüido que «es la mejor forma de garantizar que los trabajadores humanitarios pueden llevar a cabo su trabajo de forma segura y efectiva».
«Seguimos trabajando con Egipto y Qatar para encontrar una vía en las negociaciones que sea aceptable a ambas partes, pero por muy duro que trabajemos sobre textos y fórmulas creativas, esto es a fin de cuentas una cuestión de voluntad política, de si los líderes en ambas partes están preparados para reconocer que ya es suficiente y que ha llegado el momento de tomar medidas duras y aceptar compromisos complicados para poner fin a esta carnicería», ha señalado.
TILDA DE «HORRIBLE TRAGEDIA» LA MUERTE DE UNA ACTIVISTA
Por otra parte, ha condenado en una comparecencia ante el Consejo de Seguridad de la ONU la muerte de una activista estadounidense de ascendencia turca tras ser tiroteada por militares israelíes durante una protesta contra los asentamientos en Cisjordania, que ha descrito como «una horrible tragedia que nunca debió suceder».
«Seguiremos pidiendo detalles y pidiendo acceso a la investigación de Israel. Presionaremos para que haya rendición de cuentas en torno a las circunstancias que llevaron a la muerte de Aysenur Ezgi Eygi», ha manifestado, antes de incidir en que «su muerte, como muchas otras durante este último año, fue trágica e innecesaria».
El Ejército de Israel afirmó la semana pasada tras una investigación que la activista murió «muy probablemente como resultado de un disparo indirecto y no intencionado que estaba destinado a un instigador», tras lo que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reclamó «una total rendición de cuentas» por la muerte de Eygi, si bien afirmó que se habría tratado de «un trágico error».
Por su parte, la familia de la activista ha pedido a Estados Unidos una «investigación independiente» argumentando que «dadas las circunstancias del asesinato de Aysenur, una investigación de Israel no es adecuada», mientras que el Gobierno palestino ha condenado «firmemente» la «brutal ejecución» de la joven. Turquía ha anunciado la apertura de una pesquisa en torno al suceso. (Europa Press)