Sala rechazó proyecto que prohibía las carreras de perros
La iniciativa buscaba sancionar a quienes organizan una carrera de perros, cualquiera sea su raza, con presidio menor en su grado mínimo y multas de 2 a 30 UTM. También castigaba con una multa a quienes promovieran o difundieran estas carreras. Pasó ahora a archivo.
La Sala de la Cámara rechazó, por 68 votos en contra, 58 a favor y 13 abstenciones, el proyecto que modifica la Ley 20.380, sobre protección de animales. El objetivo era prohibir y sancionar la organización de carreras de perros .
La propuesta, que ahora pasó a archivo, sancionaba a quienes organizaran una carrera de perros, cualquiera sea su raza, con presidio menor en su grado mínimo (de 61 a 540 días).
A ello se agregaban multas de 2 a 30 Unidades Tributarias Mensuales (UTM). Además, se castigaba con una multa de 2 a 20 UTM a quienes promovieran o difundieran estas carreras.
Cabe recordar que, durante el trámite en la Comisión de Medio Ambiente, se presentó una indicación al proyecto que pretendía autorizar este tipo de carreras considerando tres requisitos mínimos.
El primero de ellos proponía realizar las carreras sin que existiera maltrato animal. El segundo buscaba no llevar a cabo actividades ilícitas como las apuestas. Y, el tercero, pretendía desarrollar condiciones de bienestar para los animales.
La enmienda no contó con el respaldo de la mayoría de las y los parlamentarios, ya que sostuvieron que estaba en contra del espíritu del proyecto de ley.
Durante el debate en la Sala, un grupo de legisladores se manifestó en contra de la iniciativa. Pidieron dejar de menoscabar las tradiciones, cuidarlas y respetarlas.
En tal plano, llamaron al Ejecutivo a apoyar la moción (boletín 12786) que busca modificar la Ley 20.380, sobre Protección de los animales, para regular las carreras de perros. Consideraron que la solución no sería prohibir, sino crear una ley para regular las carreras de perros.
Las y los parlamentarios también insistieron en que el proyecto de ley solo demuestra el desconocimiento sobre la actividad que se realiza en los sectores rurales del país.
Otros legisladores y legisladoras defendieron la iniciativa solicitando apoyar el bienestar animal.
Señalaron que el abuso y la explotación son los conceptos que definen a los perros galgos. Al mismo tiempo, advirtieron que en esta actividad se explota a seres sintientes. También que el vínculo que tienen las personas que realizan las carreras es solo lucrativo.
Por último, manifestaron que este proyecto respondía a un nuevo intento por terminar con el maltrato animal. Añadieron que las y los parlamentarios están en la obligación de legislar sobre el maltrato, que no es lo mismo que sobre las costumbres.