El Banco Central publicó hoy su Informe de Política Monetaria (Ipom), donde advierte que el aumento en las tarifas de la energía eléctrica impactará negativamente en los esfuerzos por reducir la inflación.
Los precios de este servicio estuvieron congelados durante casi cuatro años debido a la pandemia de Covid-19, sin embargo a partir de julio se realizará un ajuste que implica un fuerte incremento en el gasto de los hogares.
Según el instituto emisor, como consecuencia de esta alza el índice de precios al consumidor al finalizar diciembre será de 4,2 por ciento, en 2025 alcanzará los 3,6 y sólo un año después se llegará a los tres puntos esperados.
El gobierno anunció un programa de subsidios, pero este llegará a un reducido sector de la población más vulnerable y el resto tendrá que hacer un mayor desembolso cada mes o eliminar otros gastos para compensar su presupuesto.
Según estimaciones de expertos, una familia promedio que reciba una factura mensual de 20 mil pesos, pagará a partir del próximo mes alrededor de 30 mil.
Respecto al Producto Interno Bruto, este crecerá entre 2,25 y tres por ciento en 2024, impulsado por el alza del precio del cobre.
Para 2025 y 2026 la tasa de incremento de este renglón se estimó entre 1,5 y 2,5 puntos porcentuales, respectivamente.
El documento resalta que el Consejo del Banco Central mantendrá el seguimiento de las metas de inflación, con especial atención en que el impacto por las nuevas tarifas eléctricas sea el esperado y este indicador no aumente más allá de lo previsto.
También acompañará adecuadamente a la economía chilena, que está entrando en un proceso de crecimiento, con una mejoría en el mercado laboral.