Sólo cinco de los 12 excarabineros formalizados por corrupción quedaron en prisión preventiva por orden del Séptimo Juzgado de Garantía que otorgó 120 días para la realización de la investigación.
A otros dos imputados se les impuso arresto domiciliario total, y cinco arresto domiciliario nocturno, además de arraigo y prohibición de acercamiento a víctimas.
Los ahora excarabineros, la mayoría perteneciente a la segunda Comisaría de Santiago, están imputados de diversos delitos en el Barrio Meiggs, como el de cohecho, tráfico de drogas, amenazas y apremios ilegítimos.
En la causa habría 13 involucrados, pero uno de los exuniformados continúa prófugo de la justicia.
De acuerdo con el relato de Alfonso Numi, representante del barrio Meiggs donde operaban los uniformados entre 2022 y 2023, señaló que “iban a los lugares más complicados a ofrecer servicio de protección a los comercios de comerciantes chino establecido. Se cobraba en los turnos de mañana y tarde $300 mil por una vereda”.
Asimismo, mencionó que «permitían en algunos horarios que en el barrio se pueda vender cigarros contrabandeados».
«La gente no quería denunciar por miedo, y el nivel de extorsión y de presión era tan grande que los comerciantes chinos, de una manera muy valiente, decidieron denunciar», añadió.