Nuevo jefe de gabinete de Argentina destaca vocación de diálogo con otras fuerzas
Guillermo Francos expresó la expectativa de estar a la altura de su nueva responsabilidad en el tránsito de "un camino de búsqueda de consensos para aprobar una ley que está en el Senado", en alusión a la Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos.
El flamante jefe de Gabinete argentino, Guillermo Francos, admitió este martes la necesidad que tiene el Ejecutivo que preside Javier Milei de consensuar con otras fuerzas políticas para llevar adelante su programa de Gobierno.
«Somos una minoría parlamentaria, no tenemos ningún gobernador, tenemos que hablar con otras fuerzas y coordinar nuestro equipo de Gobierno con esas otras realidades políticas que tiene Argentina», manifestó el funcionario durante una rueda de prensa en la Casa Rosada, sede del Ejecutivo.
Francos, quien ejercía como ministro del Interior desde que el actual Ejecutivo asumió el 10 de diciembre, fue designado al frente de la Jefatura de Gabinete en la noche de la víspera, cargo que hasta ahora ocupaba un amigo del presidente, Nicolás Posse.
El nuevo jefe de Gabinete expresó la expectativa de estar a la altura de su nueva responsabilidad en el tránsito de «un camino de búsqueda de consensos para aprobar una ley que está en el Senado», en alusión a la Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos.
Esta normativa, que es discutida desde hace varias semanas en un plenario de comisiones de la cámara alta tras su aprobación en la Cámara de Diputados el 30 de abril, plantea una amplia reforma del Estado con desregulaciones en diversas áreas.
Francos reconoció que para sancionar la Ley Bases, habrá que conceder «algunas modificaciones, como surge de cualquier negociación», dada la «minoría parlamentaria muy marcada» en la que se encuentra el Gobierno, por lo que se «requiere de la voluntad de otros actores políticos».
En esa línea, su nueva función consistirá en «coordinar el trabajo de los ministros alineados a la política nacional y a los intereses políticos de otros sectores y de los Gobiernos provinciales».
«Lo que hemos aprendido en esta experiencia de seis meses es que tenemos que reorganizar la estructura de Gobierno: el jefe de gabinete es un coordinador del gabinete, y quizás por la forma en que nosotros asumimos, proviniendo de una fuerza que no tenía andamiaje institucional, se concentraron demasiadas tareas en la jefatura que deberían distribuirse en el resto de los ministerios», razonó.
Por lo tanto, su cometido como jefe de Gabinete será «dialogar con los distintos sectores políticos para encontrar un camino común para Argentina».
Sin ninguna mención a Posse, la Oficina del Presidente destacó en la noche del lunes que el nuevo jefe de gabinete «aportará su profesionalismo, experiencia y capacidad política», al valorarlo como «uno de los artífices de la gesta que llevó a Javier Milei a la presidencia».
Tanto Posse como Francos asumieron sus respectivos cargos con la asunción del Gobierno de Milei, el 10 de diciembre.
Más de 30 funcionarios, entre ministros, secretarios, subsecretarios o directores, han abandonado la actual gestión desde entonces.