La Compañía de Jesús, tras un largo proceso interno, decidió la expulsión del sacerdote Felipe Berríos, acusado de hechos de connotacion sexual.
A Berríos, además, se se le prohíbe todo contacto pastoral con menores de edad por 10 años.
Tanto las víctimas como el sacerdote ya fueron notificados de esta decisión, informó la Compañía.
Hace dos años, en abril de 2022, el fundador de Techo fue denunciado en la Compañía de Jesús por “hechos de connotación sexual” y las primeras diligencias encontraron que la acusación era verosímil. Entonces el Vaticanos ordenó una investigación un proceso administrativo penal en contra del sacerdote que realizó el vicario judicial de la Arquidiócesis de Córdoba, Dante Simón.
El juicio que culminó está semana determinó, según la compañía, que “luego de un largo proceso canónico, el padre general de la Compañía de Jesús, tras haber estudiado los antecedentes recopilados, ha decretado la expulsión de Felipe Berríos de la Compañía de Jesús”.
“Al mismo tiempo y con el mandato del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, le ha prohibido el ejercicio público del sacerdocio y todo contacto pastoral con menores de edad durante un período de 10 años. Ambas sanciones podrán ser apeladas”, señalan.
Berríos había presentado su renuncia a la Compañía de Jesús, pero no había solicitado la dimisión. En una carta a cercanos criticó a la congregación manifestando que no le habrían dado apoyo en el proceso en su contra. Por ello tomó la decisión de dejar la orden religiosa en la que ingresó en 1977 con 21 años de edad- para retornar al campamento Luz Divina, en el sector de La Chimba de Antofagasta.