Fiscal del TPI defiende la acusación contra Netanyahu y afirma que «nuestro trabajo no es hacer amigos»
Khan recibe presiones "directas" y amenazas a diario desde la petición de la orden de arresto contra Netanyahu, Gallant y tres líderes de Hamás.
El fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional (TPI), Karim Khan, ha defendido su petición de emitir una orden de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por crímenes de guerra en la Franja de Gaza y ha respondido a las críticas alegando que su trabajo «no es hacer amigos».
«Evidentemente soy consciente de que Gaza está en el epicentro de las relaciones internacionales, pero eso no puede ser una excusa para no poner siempre por delante los derechos de las víctimas», ha afirmado en una entrevista publicada este domingo por el periódico ‘The Sunday Times’.
«Nuestro trabajo no es hacer amigos, sino hacer nuestro trabajo. Nos aplaudan o nos critiquen (…). Ya sean judías o palestinas las víctimas, ya sean musulmanas, cristianas o sin credo, debemos tener la misma indignación moral, amor, cuidados y preocupación. La clave es que todos somos seres humanos», ha argumentado.
El fiscal ha destacado que hay datos suficientes que fundamentan sus acusaciones. «Incluso si no creemos a los médicos palestinos, hay médicos estadounidenses y británicos que relatan amputaciones sin anestesia, bebés que mueren en las incubadoras por falta de suministro eléctrico y gente muriendo por la falta de insulina», ha explicado.
«Tenemos muchas pruebas, testigos, médicos que han realizado operaciones, la propagación de la diarrea por la falta de agua (potable). Hay pruebas de satélite, videos verificados, declaraciones de militares y cargos israelíes,…», ha añadido.
RECHAZA LA EQUIVALENCIA ENTRE ISRAEL Y HAMÁS
Khan también ha respondido a uno de los argumentos más recurrentes de las autoridades israelíes, la «equivalencia» entre los crímenes de Hamás y los de las Fuerzas Armadas israelíes. Para él «no tiene sentido» porque «no estoy diciendo que Israel, su democracia y su tribunal supremo sean iguales que Hamás, evidentemente no». «No puedo haber sido más claro: Israel tiene todo el derecho a proteger a su población y a recuperar a sus rehenes, pero nadie tiene licencia para perpetrar crímenes de guerra o crímenes contra la humanidad. Los medios nos definen», ha remachado.
Así, ha mencionado el conflicto en Irlanda del Norte cuando el Ejército Republicano Irlandés (IRA) estaba activo. «Intentaron matar a Margaret Thatcher. Mataron con una bomba a Airey Neave, a lord Mountbatten, se produjo el atentado de Enniskillen, había tiros a las rodillas, pero los británicos no dijeron ‘Bueno, pues en la calle Falls (epicentro del barrio católico de Belfast) seguro que hay algunos miembros del IRA y simpatizantes republicanos, así que lancemos allí una bomba de 900 kilos. No puedes hacer eso», ha alegado.
Khan ha abordado también la posibilidad de que el tribunal apruebe finalmente su petición de arresto contra Netanyahu, su ministro de Defensa, Yoav Gallant, y tres dirigentes de Hamás y la obligación de los países firmantes del Estatuto de Roma de detener a estas personas si pisan su suelo. «Tendría enormes implicaciones si los Estados no cumplen. El TPI es su hijo. Yo solo soy la canguro, una ayuda contratada. Tienen la opción de cuidar a su hijo o de ser responsable de su abandono», ha apuntado.
Además, ha recordado que su trabajo se apoya en informes de juristas y expertos como Amal Clooney, la baronesa Kennedy, Adrian Fulford, Elizabeth Wilmshurst, Danny Friedman, y Theodor Meron. Wilmshurst participó en la redacción del Estatuto de Roma constitutivo del TPI y Meron es un abogado y juez judío estadounidense-israelí superviviente del Holocausto. «¿Van a llamarle antisemita?», ha argumentado Khan. «Que haya habido unanimidad sobre las pruebas es muy importante», ha remachado.
«Esas palabras tan profundas, ‘Nunca más’, se utilizan demasiado a menudo como mantras rituales y hemos llegado a un momento en el que la gente de todo el mundo ya no se lo cree», ha resaltado. «El mundo observa lo que está pasando. En América Latina, África y Asia. ¿Los Estados más poderosos son sinceros cuando dicen que hay un cuerpo de leyes o este sistema no tiene sentido y es solo una herramienta de la OTAN para el mundo postcolonial sin intención real de aplicarlo con igualdad?», ha planteado.
«PUEDE QUE NO SEAMOS PERFECTOS, PERO SOMOS SINCEROS»
Khan ha recordado así que el TPI tiene casos abiertos en Filipinas, Afganistán, Birmania, Bangladesh, América Latina, Georgia, Ucrania y Palestina. «Puede que no seamos perfectos, pero somos sinceros y nos guían las pruebas, no factores externos como la conveniencia política», ha subrayado.
Khan ha explicado que le llegan correos electrónicos «y otro tipo de amenazas y presiones a diario», tanto «directamente como por otras vías», pero ha recordado que él mismo forma parte de una minoría, la comunidad islámica Ahmadía, y que su familia fue atacada en Reino Unido por musulmanes que les consideran herejes.
Khan nació en Edimburgo, Escocia, hijo de padre paquistaní y madre británica, pero se crió en Yorkshire manteniendo la fé Ahmadía de su padre. «Han muerto familiares míos tiroteados en Lahore, cuando atacaban las mezquitas. Mi padre, mi madre y mi hermano pequeño y mi primo, que es médico, fueron atacados» en 1989 en Yorkshire. Se emitió una fatua o edicto religioso contra su padre.