Familiares de rehenes amenazan a Netanyahu de que «arderán las calles» si no acepta acuerdo con Hamás
Los manifestantes han cortado ya la emblemática autopista Ayalon en Tel Aviv y han tomado la calle Begin, según recogen medios israelíes.
Familiares de los secuestrados en la Franja de Gaza han salido este lunes a las calles de las principales ciudades israelíes para exigir un acuerdo para la liberación de los rehenes y han advertido al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de que «arderán las calles» si no acepta la propuesta a la que ha accedido el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Los manifestantes han cortado ya la emblemática autopista Ayalon en Tel Aviv y han tomado la calle Begin, según recogen medios israelíes.
Una de las familiares, Einav Zangauker, madre del rehén Matan Zangauker, ha emplazado a Netanyahu a ser «valiente», «un líder». «El Gobierno y el gabinete de guerra deben aceptar el acuerdo. Necesitamos a nuestros rehenes en casa. Hasta el último de ellos», ha afirmado en declaraciones a la televisión israelí Canal 12.
«Si pierden esta oportunidad, que probablemente sea la última que tendré yo de ver a Matan en casa, y el resto de las familias de poder ver a sus seres queridos en casa, lo haré. Sacaremos a todos los ciudadanos del país. Arderán las calles. Hay un límite. No puedes jugar con la vida de nuestros hijos, ¡tráelos a casa ahora!», ha añadido.
Hamás ha anunciado que acepta la última propuesta de alto el fuego para la Franja de Gaza planteada por los países mediadores Qatar y Egipto. Sin embargo, voces como la del ministro de Seguridad israelí, Itamar Ben Gvir, han rechazado ya la posibilidad de aceptar este acuerdo y apuntan a que la propuesta no tenía el visto bueno de Israel.
El anuncio de Hamás se produce pocas horas después de que Israel iniciara la evacuación de la población palestina de Rafá con vistas al comienzo de una ofensiva militar contra el que consideran último reducto de Hamás en la Franja de Gaza.
En Rafá hay más de 1,2 millones de desplazados como consecuencia de la entrada de tropas israelíes que han ido barriendo de norte a sur el enclave palestino. Más de 34.000 personas, la mayoría civiles, han muerto en esta ofensiva de represalia a los ataques de las milicias palestinas del 7 de octubre en los que murieron unas 1.200 personas. (Europa Press)