La empresa minera chilena Codelco mantiene hoy su posición como primera productora mundial de cobre, tras fracasar el intento de megafusión entre las corporaciones transnacionales BHP Group y Anglo American.
Desde finales de abril reciente la firma BHP, con sede en Australia, hizo una oferta de compra a la británica Anglo American por 49 mil millones de dólares, que tensionó y mantuvo en vilo durante unas cinco semanas a los mercados metalúrgicos mundiales.
Sin embargo, este miércoles las partes interesadas informaron el término de las negociaciones al no alcanzar ningún avance significativo.
En caso de finalizar con éxito la operación, habría surgido una gigantesca potencia de materias primas que superaría a sus rivales más cercanos, en particular a la compañía chilena, en momentos de escasez de varios metales y con una tendencia al alza de los precios.
BHP tiene 90 filiales en el mundo, incluida Chile, donde opera varias minas, y la adquisición de su rival del Reino Unido le hubiese permitido una posición dominante para establecer condiciones en el mercado e influir sobre el valor de los minerales a nivel global.
Para la Corporación Nacional del Cobre (Codelco) el golpe era grande por diversas razones, entre ellas, que perdería su condición de primer abastecedor de cobre y sus derivados, justo cuando crece la avidez por ese metal en la carrera por las llamadas tecnologías limpias.
Además, la presencia de un competidor tan fuerte le obligaría a revisar sus estrategias de inversiones, negocios y alianzas y la forzaría a adaptarse a un mercado diferente, con nuevos enfoques.
En estos momentos, Chile es el principal productor de cobre en el mundo, pero no tiene capacidad para influir en el precio de esa materia prima, que se fija en la bolsa de Londres.
