El neerlandés Max Verstappen lanzó con fuerza su candidatura al trono del Mundial de Fórmula Uno (F1), tras ganar hoy el Gran Premio de Bahréin, primera carrera de la temporada.
Monarca de las últimas tres campañas, Verstappen arrancó desde la primera raya de la parrilla (ayer había dominado la ‘pole position’), y dominó la competencia de principio a fin, sin sobresalto alguno.
El neerlandés de la escudería Red Bull Racing recorrió las 57 vueltas al Circuito Internacional de Sakhir a un ritmo demencial.
El paseo del tricampeón del mundo fue de tal magnitud que desde la ronda 27 ya le sacaba 14 segundos a su compañero de equipo, el mexicano Sergio Pérez, a la postre ocupante del segundo lugar (a 22.457 segundos).
Para la tercera posición quedó el español Carlos Sainz, con su Ferrari, a minutos de Verstappen.
Detrás llegaron el monegasco Charles Leclerc (Ferrari), y los británicos George Russell (Mercedes), Lando Norris (Mclaren) y Lewis Hamilton (Mercedes), por ese orden.
La próxima parada del Mundial de F1 tendrá lugar en el circuito Jeddah International Street de Arabia Saudita, el próximo sábado.
Estas dos primeras carreras se programaron de forma atípica los sábados (normalmente se corren los domingos), a causa del Ramadán (noveno mes del calendario islámico, respetado por musulmanes en todo el mundo como el mes de ayuno, oración, reflexión y comunidad), que comienza el 10 de marzo y se extiende hasta el 9 de abril.
Aunque la temporada recién arrancó hoy, la enorme mayoría de los expertos coincide en que, salvó milagro insospechado o gran accidente, Verstappen ganará el Mundial por amplia ventaja sobre todos sus adversarios.
Mientras tanto, aseguran igualmente que la escudería Red Bull arrasará en el campeonato de constructores sin muchos contratiempos. (Prensa Latina)
