Secretario de Defensa de EEUU asume su «responsabilidad» por ocultar hospitalización

La hospitalización de Austin, que tuvo lugar en enero, generó polémica porque ni la Casa Blanca ni el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ni la propia sustituta de Austin estaban al tanto del ingreso.

El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, ha asumido este jueves su «responsabilidad» ante una comisión del Congreso estadounidense por su decisión de no comunicar su hospitalización debido a un cáncer.

«Debería haber informado de inmediato al presidente, a mi equipo, al Congreso y al pueblo estadounidense sobre mi diagnóstico de cáncer y su tratamiento posterior», ha dicho Austin durante una sesión ante la comisión de Servicios Armados de la Cámara de Representantes.

Austin ha aseverado que la situación no fue manejada «correctamente», por lo que ha asumido «toda la responsabilidad». «Nunca tuve la intención de ocultar mi hospitalización a la Casa Blanca ni a nadie más», ha agregado.

Preguntado ante la opción de que la Administración prescinda de sus servicios como secretario de Defensa, Austin ha reconocido que el presidente, Joe Biden, «ha expresado una confianza total» en él, según ha recogido la cadena ABC News.

Mike Rogers, presidente de la comisión, ha recordado que «en pleno apogeo» de los conflictos de Ucrania e Israel, así como de los ataques en el mar Rojo y en Siria e Irak, «el comandante en jefe no sabía que su secretario de Defensa estaba fuera de servicio».

Por su parte, la republicana Nancy Mace, de Carolina del Sur, ha subrayado que «cualquier trabajador que hubiera hecho» lo mismo que Austin «sería despedido». «Y ellos no son el número dos en la cadena de mando de la fuerza de combate más grande y letal del mundo», ha sentenciado.

Una revisión interna del Departamento de Defensa concluyó que el secretismo sobre el estado de salud de Austin ue le llevó a estar hospitalizado e incluso a ser internado en la unidad de cuidados intensivos por complicaciones de una cirugía de cáncer de próstata, se debió a las restricciones de privacidad de protocolo.

La hospitalización de Austin, que tuvo lugar en enero, generó polémica porque ni la Casa Blanca ni el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ni la propia sustituta de Austin estaban al tanto del ingreso.

El secretario de Defensa, de 70 años, se encuentra inmediatamente detrás del presidente Biden en la cadena de mando del Ejército estadounidense y desempeña un papel central en los numerosos escenarios en los que Washington está implicado militarmente en todo el mundo.(Europa Press)

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

El Periodista