Lula destituye al ‘número dos’ de la Inteligencia brasileña
Moretti será reemplazado por Marco Cepik, que se encontraba al mando de la Escuela de Inteligencia de Abin. También serán reemplazados los directores de siete de los departamentos de la agencia, lo que demuestra una amplia reestructuración de la agencia de inteligencia.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha destituido este martes al director adjunto de la Agencia de Inteligencia Brasileña (Abin), Alessandro Moretti, que está siendo investigado por su presunta implicación en una red de espionaje ilegal de adversarios políticos durante el gobierno de su predecesor, Jair Bolsonaro.
Moretti será reemplazado por Marco Cepik, que se encontraba al mando de la Escuela de Inteligencia de Abin. También serán reemplazados los directores de siete de los departamentos de la agencia, lo que demuestra una amplia reestructuración de la agencia de inteligencia, informa el portal de noticias G1.
Esta decisión ha tenido lugar poco después de que Lula defendiera la salida del actual ‘número dos’ de la Abin, quien tiene «relación» con el diputado Alexandre Ramagem, uno de los principales investigados en el caso, entre los que se incluye uno de los hijos de Bolsonaro, Carlos.
Lula había negado que se esté persiguiendo a los Bolsonaro, recalcando que «el Gobierno no ordena a la Policía Federal y mucho menos en la Justicia». Existe una investigación, había explicado, por parte de un juez del Tribunal Supremo, «que es quien ha pedido una orden de registro ante las sospechas de mal uso de la Abin».
Ante el descrédito de la Abin durante los últimos años, una de las primeras decisiones que adoptó el nuevo Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva fue apartar a los militares de la agencia y hacerla dependiente del Gabinete de la Presidencia.
La decisión, si bien planteada durante el periodo de transición –debido a la impronta bolsonarista de muchos de sus miembros– acabó por acelerarse tras los ataques del 8 de enero a las instituciones, en medio de sospechas y acusaciones de connivencia por parte de los militares. (Europa Press)