Activistas alimentarias arrojan sopa contra la protección de cristal de ‘La Gioconda’ en el Museo del Louvre
Las activistas piden la integración de un cheque por alimentos en la Seguridad Social francesa.
Una pareja de activistas del grupo Riposte Alimentaire (Respuesta Alimentaria) a favor de la alimentación sostenible, han arrojado este domingo dos botes de sopa contra la protección de cristal del cuadro ‘La Gioconda’ de Leonardo Da Vinci, en el museo parisino del Louvre, como un acto de protesta contra el actual sistema agrícola y para integrar un cheque de alimentación en la Seguridad Social francesa.
Des militantes pour le climat jettent de la soupe sur le tableau de La Joconde au musée du Louvre.
Léonard de Vinci doit se retourner dans sa tombe 😂pic.twitter.com/6Evh7EhojF— Carėne Tardy (@Carene1984) January 28, 2024
«¿Qué es más importante? Nuestro sistema agrícola está enfermo», gritó una de las activistas tras arrojar el líquido y después de cruzar junto a su compañera el cordón de seguridad que separaba al público del cuadro. Los servicios de seguridad del Museo del Louvre han procedido a evacuar a los turistas y a cubrir la pintura con lonas negras.
El grupo, en su cuenta de la red social X, se ha atribuido la acción e identificado a sus responsables como dos mujeres de 24 y 63 años quienes, a través de su «acción no violenta exigen el establecimiento de una Seguridad Social Alimentaria Sostenible».
Respuesta Alimentaria denuncia que, en Francia, «una de cada tres personas se salta las comidas por falta de medios» mientras que «al mismo tiempo, se desecha el 20 por ciento de los alimentos producidos».
«Nuestro modelo estigmatiza a los más precarios y no respeta nuestro derecho fundamental a la alimentación», lamenta el grupo, que acaba reivindicando, «para evitar las hambrunas masivas que nos amenazan», una transformación del modelo de producción de alimentos.
Así pues, Respuesta Alimentaria aboga por «la integración de los alimentos al sistema general de seguridad social», en una demanda que «permitirá a cada persona beneficiarse de una tarjeta alimentaria vital con un importe de 150 € cada mes, para adquirir productos homologados y seleccionados democráticamente». (Europa Press)