Por una abrumadora mayoría, la Junta Nacional de la Democracia Cristiana (DC) decidió hoy votar en contra del proyecto de constitución chilena tras considerar que solo beneficia a la derecha y no a todo el país.
En una reunión que contó con la participación de 192 delegados, el 92,3 por ciento se posicionó por el rechazo y solo 7,69 por el apruebo al texto.
Francisco Huenchumilla, senador de la DC, denunció que la propuesta mantiene sustancialmente la carta magna impuesta por el dictador Augusto Pinochet, maquillándola con cierta retórica.
Dentro de los rasgos conservadores mencionó el hecho de que los más ricos y pudientes del país no paguen contribuciones de bienes raíces, el retroceso con respecto a los derechos de las mujeres y la invisibilidad de la relación de los pueblos indígenas con el Estado.
El proyecto, presentado la víspera al presidente de la república, Gabriel Boric, fue aprobado por el Consejo Constitucional, donde el Partido Republicano, de extrema derecha, y la conservadora alianza Chile Vamos aprovecharon la mayoría absoluta para imponer un documento favorable a sus intereses.
Una declaración de la Democracia Cristiana señala que este es un texto “partisano, contradictorio, ineficiente e ineficaz”.
La propuesta de ley fundamental deberá ser sometida a la consideración de la ciudadanía en el referendo del 17 de diciembre.
Numerosas formaciones políticas de centro izquierda ya anunciaron su voto en contra, entre ellos el Frente Amplio, integrado por Revolución Democrática, Comunes y Convergencia Social; así como el Partido Comunista, el Socialista, el Radical, el Partido por la Democracia y la Federación Regionalista Verde Social.