Académicos UChile explican sorpresivos resultados de primera vuelta en Argentina
La clave de la segunda vuelta será qué pesa más, si la dicotomía democracia versus autoritarismo que plantea Massa o o la dicotomía Kirchnerismo-antikirchnerísmo que plantea Milei, señala uno de los expertos.
Una sorpresa fueron los resultados de las elecciones presidenciales celebradas este domingo en Argentina, donde el candidato de Unión por la Patria, el oficialista Sergio Massa, lideró la primera vuelta, mientras que el ultraderechista Javier Milei, quien aparecía primero en los sondeos, quedó segundo, pasando ambos a balotaje.
El académico del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile, Federico Rojas, reconoce que el resultado “es sorpresivo. La mayoría de las encuestas en la última semana ubicaban a Javier Milei en primer lugar, aunque en los últimos días empezaron a aparecer otras encuestas que habían captado el cambio de la votación y el avance de Sergio Massa y, de hecho, lo ubicaban en primer lugar, pero eran minoritarias. La mayor parte de las encuestas preveía un triunfo de Javier Milei que no se cumplió”.
“Ciertamente, hubo una activación de la campaña de Massa que no se vio en las PASO (Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias). Ahora bien, siempre hay una variación entre las PASO y las elecciones generales, esa parte no es una novedad, pero sí fue sorpresivo el resultado”, indicó el profesor Rojas.
Por su parte, la también académica del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile, Paz Milet, también destacó que “la verdad es que sí es sorpresivo. Massa pasó de ser la tercera fuerza en las PASO a constituirse en la primera, sacarle 6 puntos de ventaja a Milei, que era la primera opción en las PASO”.
La sorpresa, explica la académica, es que Massa haya pasado primero al balotaje, porque “sí se veía que Milei iba perdiendo adhesión los últimos días a partir de una serie de disputas, de controversias, fundamentalmente el tema del subsidio del transporte. Él había anunciado que estudiaría el término del subsidio al transporte, lo que había generado malestar en la ciudadanía, pero también la controversia que tuvo con el Papa, las críticas que efectuó el Papa, quien, sin nombrarlo, habló de lo complicado que es que la gente siga a encantadores de serpientes, y eso también afectó en un escenario en que todos sabemos que Argentina es un país católico y el Papa es argentino, así que hay una adhesión muy fuerte a su figura”.
Cómo se proyecta la segunda vuelta
La sorpresiva segunda vuelta entre el oficialista Sergio Massa y el ultraderechista Javier Milei será el domingo 19 de noviembre. Para el 12 de noviembre, en tanto, está programado un debate presidencial entre los dos candidatos.
Federico Rojas detalla que para esta segunda vuelta y su periodo de campaña, “hay dos estrategias convocantes pero distintas: Sergio Massa convocó a un gobierno de unidad en base a valores democráticos. Es un escenario en que se siente muy cómodo dado su estilo de hacer política que, en general, es dialogante, de acuerdos, de consensos. Es un político que ha pasado por diferentes espacios y que se siente muy cómodo buscando votos y ampliando su electorado porque, de cierta manera, eso calza con su propio perfil como político”.
“Por otro lado, Javier Milei apeló a los votantes más duros de Juntos por el Cambio y planteó una dicotomía contra el Kirchnerismo y pasó de criticar a la casta, en un sentido más amplio, la casta política, a criticar al Kirchnerismo de forma más específica, de manera de incluir, dentro de su espacio, a los votantes de Patricia Bullrich y Juntos por el Cambio, una candidata a la que hace unos días estaba criticando con palabras durísimas”, indicó Rojas.
En este sentido, el académico de la Universidad de Chile sostiene que “la pregunta es qué pesa más en esta segunda vuelta: si la dicotomía democracia versus autoritarismo que plantea Massa, generando una suerte de gobierno unidad nacional en base a valores democráticos, o la dicotomía Kirchnerismo-antikirchnerísmo que plantea Milei. Hay un punto muy relevante en el discurso de Sergio Massa, el que afirmó que la grieta se murió, la grieta kirchnerismo-antikirchnerismo, y creo que esta es una elección que plantea un quiebre en ese clivaje que estructuró la política argentina en los últimos 15 años”.
Sobre la campaña previa a la segunda vuelta, la profesora Paz Milet añade que “este periodo de campaña va a ser particularmente duro. Es un período corto porque la segunda vuelta del 19 de noviembre se desarrollará con un alto nivel de polarización. Entonces, lo que se espera, sin duda, es que se busquen nuevas adhesiones, nuevos votos».
«Preocupa en el sector de Milei que, si uno ve, se mantuvo con lo que obtuvo en las PASO, no logró captar mayores adherentes y, sin duda, él ya ha manifestado que va a acercarse, está dispuesto a escuchar a Macri. Claramente se va a acercar a ese sector porque Patricia Bullrich ayer, cuando reconoció la pérdida, fue clara en decir que no apoyaría una mantención en el poder del Kichinerismo y que se permanezca en el poder Massa, entonces eso va a ser muy determinante. Se va a sacar por parte de Massa las declaraciones más conflictivas de Milei, que va a tener que enfrentarlas y en algunas de ellas retroceder de manera bastante importante y, por otro lado, sin duda Milei va a centrarse en lo que es la gestión económica de Massa y los niveles de pobreza en la Argentina», afirmó Milet.
Baja participación
En cuanto a la participación de los argentinos en las elecciones presidenciales, los datos entregados por la Cámara Nacional Electoral de Argentina indican que esta alcanzó el 77,67% del padrón electoral, superando las cifras de las primarias del 13 de agosto (70,43%), pero la más baja en unos comicios generales -tanto en primera como en segunda vuelta- desde la vuelta a la democracia.
El profesor Federico Rojas aclara que “efectivamente la participación tuvo una declinación respecto a elecciones anteriores, pero un aumento de 8 puntos porcentuales respecto de las primarias, lo cual explica gran parte del avance de Sergio Massa en conjunto con la caída de Patricia Bullrich”.
“En principio, no debiera ser sorpresivo. Es un porcentaje de participación que viene en una leve declinación elección tras elección y que podría variar en caso de que la segunda vuelta movilice a votantes. No podemos saber hoy cuál va a ser el porcentaje de participación en la segunda vuelta”, señala.
Paz Milet, por su parte, indica que esta baja “sí es preocupante, porque se había planteado esta elección como clave en el escenario futuro, pero sí, de alguna manera se entiende por el amplio descontento que hay en algunos sectores de la población respecto al actuar de la clase política. Ahora, eso se espera que pueda experimentar un cambio en la segunda vuelta porque, sin duda, va a haber una opción mucho más jugada de decir ‘bueno, lo que estemos decidiendo va a marcar el futuro de la Argentina’ y eso puede determinar un incremento en la cantidad de ciudadanos que accedan a la votación”.