Ucrania denuncia desaparición de decenas de civiles cada semana en Mariúpol
Mariúpol, una ciudad portuaria de importancia clave en la guerra, fue objetivo estratégico de Moscú desde el inicio de la invasión, desatada a finales de febrero de 2022 por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.
Las autoridades ucranianas de la ciudad de Mariúpol, bajo control de Rusia desde mediados de mayo de 2022, han denunciado que entre 50 y cien personas desparecen cada semana en las cámaras de tortura operadas por las tropas rusas.
Así lo ha relatado el principal asesor de la Alcaldía de Mariúpol, Petro Andriushchenko, quien ha reconocido que aquellos ucranianos que son arrestados por los rusos, no vuelven a aparecer, según recoge la agencia de noticias UNIAN.
Respecto a los familiares, Andriushchenko ha lamentado que en la mayoría de los casos, aquellos que buscan a los desparecidos suelen correr más tarde la misma suerte. «Si comienzas a buscar (…) entonces te conviertes en el siguiente», ha dicho.
«Cómo encontrarlos es una pregunta que para nosotros sigue sin respuesta», ha lamentado el funcionario ucraniano, que denuncia que Rusia no elabora «ni siquiera una lista aproximada» ni informan del número de arrestados.
«Desafortunadamente, lo más probable es que solo después de la victoria, la desocupación y la derrota de Rusia podremos encontrar y devolver a los hogares a todos los ucranianos», ha afirmado Andriushchenko.
A este respecto, el principal asesor del Gobierno local de Mariúpol ha aseverado que esta situación tan solo podrá combatirse a través de la vía bélica. «No vemos otro camino que el militar en lo que respecta a la recuperación y desocupación de Mariúpol», ha dicho.
Mariúpol, una ciudad portuaria de importancia clave en la guerra, fue objetivo estratégico de Moscú desde el inicio de la invasión, desatada a finales de febrero de 2022 por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.
Así, la localidad fue bombardeada y atacada con artillería durante semanas, causando una enorme destrucción y cientos de muertos. Kiev afirma que al menos 25.000 personas murieron durante los combates, incluidos hasta 7.000 que quedaron sepultadas por escombros. (Europa Press)