Una masiva y simbólica romería al cementerio, al cumplirse mañana los 50 años del golpe y organizada por familiares de víctimas de violaciones a los DDHH, ha sido empañada por la acción aislada y vandálica de cientos de encapuchados que intentaron atacar el Palacio de La Moneda.
A la romería, durante varias cuadras, se sumó el presidente Gabriel Boric, quién la encabezó junto a otras figuras invitadas, como el juez Baltasar Garzón.
Desgraciadamente al pasar por Morandé un grupo de vándalos, encapuchados y enguantados, rompieron seis ventanales, vallas perimetrales y pintaron los muros del palacio presidencial. También afectaron los vidrios del centro cultural.
Según informó el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, los hechos fueron protagonizados por «adversarios del gobierno», que no tienen relación alguna con el acto de memoria por los 50 años. Informó además que hay 3 detenidos y, hasta ahora, seis carabineros heridos.
Los encapuchados, además, atacaron una comisaría en su paso por la avenida Recoleta, han saqueado locales comerciales y levantado barricadas en diversos lugares de Santiago.
La romería, sin embargo, pudo arribar al cementerio y culminar el acto que estaba preparado.
