UDI cita a canciller y exige “renuncia inmediata” de embajadora en Reino Unido

Los diputados de la Bancada UDI que integran la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Baja, Cristhian Moreira y Cristián Labbé, anunciaron que citarán al canciller Alberto van Klaveren para que entregue mayores antecedentes y anuncie las eventuales sanciones que aplicarán contra la actual embajadora de Chile en Reino Unido, Susana Herrera, luego que realizara una serie de gestiones de índole personal con la Gobernación del Biobío para que pudieran financiar un proyecto.

En concreto, la representante del país solicitó alrededor de US$ 5 millones para ejecutar una iniciativa en la comuna de Santa Juana, trasgrediendo gravemente las funciones que le competen, por lo que junto con solicitar la comparecencia del ministro de Relaciones Exteriores a la comisión, ambos parlamentarios gremialistas también exigieron la renuncia “inmediata” de la embajadora.

“Es absolutamente inentendible que el Gobierno, a través de la Cancillería, no le haya solicitado la renuncia de forma inmediata a la embajadora de Chile en Reino Unido, quien trasgredió de manera grave sus funciones, utilizó su cargo para favorecerse personalmente, puso en riesgo la imagen de nuestro país en el extranjero y faltó a la probidad al gestionar un financiamiento para un proyecto en el que está directamente involucrada”, cuestionaron los diputados de la UDI, quienes agregaron que “es evidente que estamos frente a un grave caso de tráfico de influencias, y si las autoridades quieren demostrar su rechazo a estos temas, lo que corresponde es que la remuevan de inmediato”.

Producto de lo anterior, Moreira y Labbé lamentaron que la Cancillería no haya ordenado la salida de la embajadora Herrera de su cargo o, en su defecto, el inicio de un sumario administrativo en su contra. Por lo mismo, ambos parlamentarios insistieron en que citarán al ministro van Klaveren “a la brevedad posible”, advirtiendo que “cuando una administración no actúa como corresponde ante la falta de probidad y el tráfico de influencias en que incurre un funcionario, lamentablemente se terminan haciendo cómplices de ese acto, que es exactamente lo que les está ocurriendo ahora”.

“No basta con que el Ministerio de Relaciones Exteriores haya frenado las gestiones que estaba haciendo la embajadora a título personal. Lo que aquí correspondía era abrirle un sumario, removerla de su cargo e, incluso, presentar una denuncia ante la Fiscalía por los eventuales delitos que podrían existir, como los que atentan contra la probidad administrativa. El Gobierno está enfrentando uno de los casos más graves de corrupción del último tiempo, en el que están involucrados funcionarios de su propia administración, pero siguen actuando con absoluta pasividad, negando lo que está ocurriendo frente a sus propios ojos”, criticaron los diputados UDI.