Parlamento israelí aprueba primera ley de polémica reforma judicial
La sesión se ha celebrado en medio de una concentración por parte de decenas de miles de personas frente a la sede de la Knesset para protestar contra el proyecto.
El Parlamento de Israel ha aprobado este lunes una controvertida cláusula del proyecto de reforma judicial presentado por el Gobierno, una decisión adoptada en medio de nuevas movilizaciones a nivel nacional contra los planes del Ejecutivo del primer ministro, Benjamin Netanyahu.
La votación se ha saldado con 64 votos a favor y ninguno en contra después de que los parlamentarios de todos los partidos opositores decidieran abandonar el pleno de la Knesset ante la insistencia del Gobierno –integrado por partidos ultraortodoxos y ultraderechistas– de sacar adelante la conocida como ‘cláusula de sensatez’, según ha informado el diario israelí ‘Haaretz’.
Poco antes de la votación, los ministros de Defensa y Justicia, Yoav Gallant y Yariv Levin, respectivamente, han mantenido una discusión entre gritos de ‘vergüenza’ desde las bancadas opositoras. El propio Gallant ha hablado luego con el líder del opositor Yesh Atid, el ex primer ministro Yair Lapid, sin que haya más detalles.
Así, los esfuerzos de última hora para enmendar el proyecto de la cláusula –que habilita a los tribunales a anular una decisión del Gobierno si considera que va en contra del sistema democrático, tras el colapso de las conversaciones entre el Ejecutivo y la oposición– o lograr reactivar las conversaciones entre el Gobierno y la oposición se han demostrado infructuosos, después de 30 horas de debate sobre la misma, que han incluido el rechazo a 140 enmiendas presentadas por la oposición.
Inmediatamente después de la votación, el ministro de Finanzas, el ultraderechista Bezalel Smotrich, ha aplaudido el resultado y ha argumentado que la coalición «ha hecho todo lo posible hasta el último momento, pero desafortunadamente la oposición se ha opuesto», tal y como ha recogido el diario ‘The Times of Israel’.
Por su parte, Levin ha ensalzado lo que ha descrito como «un primer paso en un proceso histórico para corregir el sistema judicial», mientras que Netanyahu se ha ido del pleno sin hacer declaraciones después de votar. ‘Bibi’ había llegado poco antes tras recibir el alta después de someterse a una cirugía el domingo para que le colocaran un marcapasos.
Para el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, «Israel es un poco más democrático y un poco más judío» con la aprobación de esta ley. «A la izquierda, a quienes están protestando, les diría que sois nuestros hermanos y que os queremos, pero nuestro trabajo es gobernar y desarrollar una política totalmente de derecha. Hoy comprenderéis la diferencia entre este gobierno y los gobiernos anteriores, con ayuda de Dios. Esto es solo el principio», ha remachado.
Más tarde, Netanyahu se ha dirigido a la nación en un discurso en el que ha celebrado la «necesaria» aprobación de la nueva ley y ha tendido la mano a la oposición para seguir negociando con vistas a las futuras fases de la reforma. Además, ha realizado un llamamiento a la unidad de los israelíes como «hermanos» y a dejar a las Fuerzas Armadas fuera del debate político.
Desde la oposición, Lapid ha anunciado que recurrirán la ley antre el Tribunal Supremo. «No nos vamos a rendir. No vamos a convertirnos en Hungría o Polonia», ha espetado.
El otro gran dirigente de la oposición, Benny Gantz, ha criticado esta «victoria de los extremistas». «Han decidido cambiar nuestro identidad y quieren llevarnos a un abismo de odio, dividirnos y que nos enfrentemos entre nosotros», ha señalado Gantz, según ‘The Times of Israel’.
«Quienes creen que hoy han ganado pronto descubrirán que ha sido un grave error para todos nosotros», ha advertido antes de destacar las multitudinarias manifestaciones contra la reforma judicial: «son nuestra esperanza». «Todo lo que se ha aprobado será anulado y borrado del libro de leyes, más tarde o más temprano», ha remachado.
MANIFESTACIONES
La sesión se ha celebrado en medio de una concentración por parte de decenas de miles de personas frente a la sede de la Knesset para protestar contra el proyecto, entre acusaciones sobre un supuesto plan de las autoridades para dar un «golpe» institucional a través del proyecto de reforma.
La Policía ha usado cañones de agua durante la protesta, que se ha saldado con al menos doce detenidos y cinco manifestantes heridos de levedad.
Después, un grupo de manifestantes ha cortado la autopista Begin y otro grupo ha cargado sin éxito contra las barreras policiales que protegen la Knesset. En Tel Aviv, epicentro de las protestas, los manifestantes han cortado de nuevo la autopista Ayalon.
Los cortes de carreteras se han multiplicado en todo el país y en uno de ellos cerca de Kfar Saba un conductor habría embestido con su vehículo contra los manifestantes. Al menos tres personas están heridas de carácter leve y el conductor ha sido detenido. Un vídeo difundido en redes sociales muestra el momento del atropello y cómo el conducto huye del lugar.
Ya por la noche, los manifestantes han encendido hogueras en la calle Kaplan entre gritos de «No nos vamos a rendir» mientras se repetían los enfrentamientos entre policías y manifestantes.
Antes de la votación, Smotrich ha denunciado que «un cerco violento destinado a evitar que los miembros de la Knesset ejerzan su derecho y deber a votar en el pleno no es democracia». «Esto es el Capitolio», alertó, en referencia al asalto registrado el 6 de enero de 2021 por parte de seguidores del expresidente estadounidense Donald Trump que rechazaban el resultado de las elecciones de noviembre del año anterior, en las que se impuso el candidato demócrata y actual mandatario, Joe Biden.
El movimiento Kaplan, principal organización tras la convocatoria de las protestas contra la reforma judicial, ha advertido de que seguirán movilizándose «hasta el final».
«El Gobierno de la destrucción ha votado en la Knesset aplastar al Estado de Israel tal como lo conocemos. Vamos a luchar hasta el amargo final. Vamos a seguir adelante con tesón en la lucha, que solo terminará con la vuelta de Israel a la democracia», ha subrayado el grupo, responsable de las 29 semanas de protestas consecutivas contra la reforma.
«El Estado de Israel pertenece al pueblo de Israel y no a un régimen monárquico. Ahora es necesario que todos demos un paso al frente y luchemos como nunca antes. Que no haya ninguna duda. Solo acabamos de empezar», ha subrayado.
Después del discurso a la nación de Netanyahu han respondido al mandatario señalándole como «único responsable de la escisión de la nación, de la destrucción del Ejército y de destrozar la economía».
«No hay nada de lo que hablar con alguien que ha decidido convertirse en (Vladimir) Putin y a Israel en una dictadura (…). Vamos a combatir a Netanyahu hasta el final para que Israel siga siendo una democracia liberal», han insistido.
Por otra parte, la Asociación Médica de Israel ha convocado una huelga de 24 horas para la jornada de este martes y el presidente de la principal confederación sindical israelí, Histadrut, Arnon Bar-David, ha adelantado su intención de convocar una huelga «que, de ser necesario, se convertirá en huelga general».
Los críticos con la reforma judicial argumentan que se trata de un ataque al equilibrio de poderes de Israel, fundamentalmente a las bases en las que se asienta la democracia, ya que concede al Parlamento una influencia inusitada para limitar las competencias judiciales. (Europa Press)