El Primer Tribunal Ambiental de Antofagasta acogió este miércoles la medida cautelar solicitada por el Consejo de Defensa del Estado en el marco de la demanda de reparación de daño medioambiental presentada en contra de la sociedad minera y su controladora, que operan el yacimiento subterráneo Alcaparrosa, ubicado en la comuna de Tierra Amarilla, decretando la suspensión temporal y provisional de sus faenas.
Conforme con lo resuelto, dicha determinación puede extenderse el tiempo que dure el juicio y, durante su vigencia, sólo se permitirá la ejecución de las medidas que la Superintendencia del Medio Ambiente u otros órganos con competencia ambiental hayan determinado, con el fin de prevenir eventuales riesgos. Lo anterior, de acuerdo con lo solicitado por el CDE en su demanda.
La jefa de la Unidad de Medio Ambiente del organismo, Natalia Alfieri, valoró la medida decretada, dado que “confirma la consistencia de los antecedentes presentados por el Consejo de Defensa del Estado y por los servicios con competencia ambiental, relativos a las graves y serias consecuencias que ha provocado la sobreexplotación del yacimiento Alcaparrosa al acuífero del río Copiapó”.
La abogada señaló que, de acuerdo con lo sostenido por el CDE en su demanda, “la sobreexplotación del mineral ocasionó una conexión hídrica entre la faena subterránea y el acuífero del río, provocando el drenaje de más de dos millones 500 mil metros cúbicos, lo que debilitó sustancialmente su estructura. La medida decretada representa la aplicación del principio de precaución en materia ambiental, y busca detener los riesgos provocados por la ejecución irregular del proyecto”.
El tribunal estimó que concurren los requisitos para decretar la medida cautelar consistentes en la verosimilitud de la solicitud y la necesidad de impedir los efectos negativos que puede ocasionar la actividad minera. Concretamente, se tuvo a la vista una eventual afectación al acuífero del río Copiapó, incumplimientos respecto de los permisos ambientales, y un riesgo inminente para la integridad y vida de los trabajadores de la faena, así como para la población de Tierra Amarilla.
