Superintendente de Salud y situación de las isapres: “La solución no puede implicar la caída del sistema”
Víctor Torres abordó el tema durante una conferencia que dictó a docentes y estudiantes del Magíster en Salud Pública de la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso.
Un llamado a los actores involucrados a dejar de pensar en poner fin a un sistema y enfocarse en cómo integrar más y mejor el actual modelo de aseguramiento público-privado en materia de acceso, garantías, cobertura y prestaciones formuló el superintendente de Salud, Víctor Torres, durante la conferencia titulada “La situación de las isapres hoy” que dictó a docentes y estudiantes del Magíster en Salud Pública, mención Gestión en Salud, que imparte la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso (UV).
Durante su intervención, la autoridad -quien también es profesor visitante de la cátedra de Anatomía de ese plantel académico- dio a conocer algunas cifras y se refirió a las diferentes iniciativas que hoy están en curso para dar cumplimiento al reciente fallo de la Corte Suprema, entre las cuales figura la ley corta que está impulsando el Ejecutivo para facilitar el cumplimiento de esa resolución y, de paso, disminuir los eventuales efectos que ésta podría generar a la continuidad de los planes de salud de miles de afiliados.
“Hoy hay dos instancias de trabajo. Por una parte, la Superintendencia ha estado haciendo diversos cálculos y viendo metodologías, precisamente para determinar cuál debiera ser eventualmente la deuda que podría generarse producto de la implementación de este fallo, que lo que busca es homologar todos los planes a la aplicación de una sola tabla. Eso es lo que nos ha tenido con más problemas en términos de poder llegar a una solución rápida. La segunda arista, más bien, tiene que ver con el proyecto de ley que ha planteado el Gobierno para hacerse cargo de esta situación, de mejor manera, producto de las limitantes que tiene la vía administrativa para resolver la magnitud del problema que se genera”, sostuvo Torres.
En relación con lo anterior, el superintendente de Salud explicó que aun cuando el panorama es complejo, en la medida en que las aseguradoras privadas mantienen una situación de pérdida que afecta a ciertos indicadores y a su patrimonio, no cree que esto ponga en riesgo la continuidad operacional de las isapres en la medida en haya un ordenamiento de sus finanzas que permita no sólo mejorar sus ingresos, sino además contribuya a hacer más eficiente su gestión, y para ello los elementos de contención de costos son claros e importantes.
“La solución no puede implicar la caída del sistema. Es decir, la solución tiene que hacerse cargo de no afectar la implementación del fallo de la Suprema en favor de las personas, la continuidad de la cobertura y el acceso a la atención. Eso obviamente no podría ocurrir si el sistema cae. Por tanto, claramente lo que hay que establecer, primero, es una forma de cumplimiento del fallo que no afecte estos indicadores, pero además -en paralelo- las isapres tienen que mejorar sus ingresos y, sobre todo, su eficiencia, que es un tema que yo sé que es resistido por ellas, pero ya hemos visto cómo un modelo de contención de costos podría mejorar la condición de las mismas, incluyendo la disminución de los gastos de administración y ventas, mejorando su capacidad de fiscalización de las licencias médicas que pudieran estar siendo mal emitidas, pero también sobre los mecanismos de pago con que cancelan y que negocian con los prestadores. Si no se genera todo esto, claramente el sistema, aun cuando salga bien de la situación en que lo ha colocado la corte, evidentemente que no tendría viabilidad”, argumentó Víctor Torres.
Integración
Tras dictar su conferencia, el superintendente de Salud conversó e intercambió puntos de vista con el doctor Mario Parada, docente del Magíster en Salud Pública de la Escuela de Medicina, quien entre otras observaciones planteó que el “choque” permanente entre las culturas pública y privada que existe en Chile sobre cómo debería ser y operar el sistema de salud impide avanzar en la implementación de un modelo más justo, amplio y que responda mejor a la realidad y las necesidades que en este ámbito enfrenta la población.
En este sentido, Víctor Torres afirmó que no se puede tener un sistema fragmentado, en especial en lo concerniente a la relación con los prestadores.
“No puede ser que una parte del sistema funcione en una dirección y la otra parte tome otra dirección. Tiene que haber una integración. Toda la capacidad instalada, pública y privada, debiera estar al servicio de aquellos problemas más relevantes del país y, obviamente, dejar un margen para que el sistema privado pueda atender aquellas cosas que no son necesariamente las más urgentes, pero esto tiene que significar una relación más virtuosa y una coordinación que vaya más acorde con los requerimientos sanitarios, como ocurrió durante la pandemia, y creo que eso fue correcto. O sea, debe existir una especie de simbiosis entre las dos culturas o visiones que hoy existen en materia de salud en Chile”, concluyó la autoridad.