ONU recuerda a Italia que estado de emergencia sobre migración debe respetar DDHH
"No podemos permitirnos titubear y enredarnos de nuevo en otro debate sobre quién es el responsable. Hay vidas humanas en juego", ha sentenciado el jefe de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk.
El jefe de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk, ha recordado a las autoridades italianas que el estado de emergencia decretado esta semana por el aumento de la llegada de migrantes no exime al país de sus obligaciones internacionales, de tal manera que cuestiones como «el derecho a la vida o la prohibición de devolución no pueden ser derogados» en ningún caso.
«Cualquier nueva política que se adopte bajo el estado de emergencia debe ir en línea con las obligaciones de Italia en materia de Derechos Humanos», ha dicho Turk, que ha exhortado al Gobierno de Giorgia Meloni a revisar sus actuales límites a las operaciones de búsqueda y a no «criminalizar» a quienes participan en ellas, por ejemplo las ONG.
En este sentido, ha advertido de que la experiencia demuestra que «adoptar una línea más dura para frenar la inmigración irregular no impedirá las salidas, sino que derivará en más sufrimiento humano y más muertes en el mar». Turk es partidario de que haya vías «seguras y regulares» con las que impedir «muertes innecesarias».
Desde el año 2014, más de 26.000 migrantes y refugiados han perecido en el Mediterráneo, entre ellas más de 20.000 en la zona central, que conecta el norte de África con Italia. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) alertó el miércoles de que el primer trimestre de 2023 había sido especialmente mortífero, con más de 440 víctimas.
«No podemos permitirnos titubear y enredarnos de nuevo en otro debate sobre quién es el responsable. Hay vidas humanas en juego», ha sentenciado Turk, al recordar que cada vez hay más «personas desesperadas» que están dispuestas a arriesgar su vida en busca de un futuro mejor.
Entre las medidas que plantea, el responsable de la ONU también ha aludido a mecanismos claros para el desembarco de las personas rescatadas, una vigilancia independiente del Mediterráneo y el reparto de cargas. A su juicio, «es momento de ser solidarios con Italia», que ha registrado en lo que va de año más de 30.000 llegadas. (Europa Press)
