Borrell defiende ante Brasil una «paz justa» donde Ucrania mantenga su independencia
"No podemos aceptar este tipo de enfoque benevolente que dice "oh, uno no quiere parar, y el otro tampoco. Oh, no". No se puede poner al mismo nivel al agresor y al agredido", recalcó el jefe de la diplomacia Europea.
El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha señalado este miércoles frente a Celso Amorim, exministro brasileño de Exteriores y actual asesor del presidente Lula da Silva, que Ucrania necesita una «paz justa» que garantice que persiste como país «soberano e independiente».
«Intercambio sustancial con Celso Amorim sobre la guerra de Rusia contra Ucrania. Todos queremos la paz, pero Ucrania necesita una paz justa, para sobrevivir como país independiente y soberano», ha asegurado en redes sociales el jefe de la diplomacia europea sobre su encuentro con Amorim en Bogotá, en el marco de la conferencia sobre Venezuela organizada por el presidente colombiano, Gustavo Petro.
En este sentido, el Alto Representante ha hecho pedagogía ante Brasil sobre «la firme determinación de la UE de seguir apoyando a Ucrania en su defensa» ante la agresión de Rusia, unas palabras que llegan después de que Lula en su viaje a Pekín acusará a Estados Unidos y la UE de fomentar el conflicto en Ucrania con el envío de armas.
Precisamente el responsable de Exteriores de la UE hizo este lunes en una rueda de prensa en Bruselas referencia a la propuesta de Brasil para una coalición de grupos que ejerzan una mediación entre Kiev y Moscú.
«China, y también Brasil, han propuesto algunas ideas sobre la paz. Para que los esfuerzos de paz sean creíbles y honestos, también hay que hablar con Kiev e ir allí para ver la agresión a través de sus ojos, a través de los ojos de los que están siendo bombardeados», aseguró Borrell, quien indicó que primero hay que ser «claro» y dejar de manifiesto que «hay un agresor, que ha violado la Carta de las Naciones Unidas y ha invadido otro país, y hay una víctima de esta agresión».
«No podemos aceptar este tipo de enfoque benevolente que dice «oh, uno no quiere parar, y el otro tampoco. Oh, no». No se puede poner al mismo nivel al agresor y al agredido», recalcó el jefe de la diplomacia, en clara alusión a las palabras de Lula. (Europa Press)