Jorge Edwards Valdés, el connotado escritor chileno que falleció el pasado 17 de marzo, junto a su herencia literaria, deja un millonario legado en dinero, derechos de autor y propiedades, cuyos beneficiarios se conocerán próximamente en España cuando se abra el testamento del creador de Persona non grata y El peso de la noche.
Edwards, quien ganara los premios Cervantes, Nacional de Literatura y Planeta, entre otros, amasó una gran fortuna que deberían repartirse sus dos hijos, Ximena y Jorge, los cuales estarían distanciados y no tendrían mucha relación entre sí. Al escritor también lo sobrevive una hermana y tiene muchos grandes amigos, alguno de los cuales podría también verse beneficiado en el testamento.
Nacido en junio de 1931, Edwards cuenta con un gran legado literario y una cantidad indeterminada de propiedades, todas en Chile.
Hijo de Sergio Edwards Irarrázabal y Carmen Valdés Lira, fue el menor de los hermanos Edwards Valdés, familia compuesta por Carmen, Laura, Angélica, Luis Germán y él mismo. Era descendiente directo de José Miguel Carrera, por el lado materno. Su esposa, hasta el 2007, fue Pilar Fernández de Castro Vergara.
Fue educado por los jesuitas en el Colegio San Ignacio, donde fue alumno del padre Hurtado, santo chileno canonizado en 2005. En la revista de dicho colegio publicó sus primeros escritos y fue por entonces que también se aventuró en la poesía.
Edwards estudió Derecho en la Universidad de Chile, donde ingresó en 1950. Dos años más tarde vio la luz su primer libro, una recopilación de cuentos titulada El patio.
En los próximo días, cuando se abra el testamento, se conocerá a quienes beneficia y de no estar clara la repartición de los bienes podría generarse una nueva batalla por la herencia en el mundo de las letras.