Bolivia afirma que no tiene obligación de detener a migrantes que vienen a Chile
El presidente Boric manifestó el miércoles que los inmigrantes deben ser enviados a su país de origen por la nación mediante la que llegaron a Chile, y que Bolivia no estaba cumpliendo con esta tarea, al ser parte de la ruta migratoria.
Bolivia no está obligado por ningún convenio internacional a detener a migrantes indocumentados de otros países que pasan por su territorio hacia Chile, ni a recibirlos una vez que son expulsados de allí, como reclamó el presidente Gabriel Boric, afirmó el miércoles el vicecanciller boliviano Freddy Mamani.
«Respecto a que Bolivia no estaría llevando adelante la reconducción de ciudadanos de otros países, entendiendo esta como una expulsión del territorio chileno, no existe ningún acuerdo, convenio o instrumento bilateral que genere dicha obligación. El procedimiento de reconducción al que se refiere el presidente Gabriel Boric es normativa chilena que no genera ninguna obligación internacional», dijo en conferencia de prensa.
La «reconducción», según las disposiciones chilenas, consiste en trasladar a los inmigrantes indocumentados hasta la frontera del país por donde ingresaron a Chile, en este caso Bolivia, para que este segundo país los envíe a su nación de origen.
«En relación a la inmigración irregular, la posición de Bolivia es que esos temas deben ser abordado con las autoridades del país de origen evitando la estigmatización negativa del migrante y cualquier acción que pueda vulnerar derechos humanos», puntualizó.
El presidente chileno manifestó el miércoles que los inmigrantes deben ser enviados a su país de origen por la nación mediante la que llegaron a Chile, y que Bolivia no estaba cumpliendo con esta tarea, al ser parte de la ruta migratoria.
Mamani manifestó que el Gobierno de Luis Arce está abierto a un diálogo bilateral para resolver el problema.
«Bolivia siempre está dispuesto al diálogo bilateral para abordar temas de interés común con los países vecinos», indicó.
Desde 2019, Bolivia se convirtió en un país de paso de los migrantes venezolanos, colombianos y haitianos, que buscan instalarse en Chile. (Sputnik)
