Aumentan penas para dos tipificaciones del secuestro
Una de ellas incrementa la sanción por un tiempo mayor de retención de la víctima; mientras que la otra impone un rango más estrecho de pena máxima frente a secuestros que presenten paralelamente consecuencias como la muerte del afectado/a.
Por unanimidad de 143 votos a favor, la Sala de la Cámara aprobó, en general y en particular, una modificación al Código Penal (boletín 15558). Su objetivo es modificar dos tipos relacionados al delito de secuestro.
Hoy, se castiga con presidio mayor en su grado mínimo a medio (de 5 años y un día a 15 años) a quien retenga a una persona para obtener un rescate, imponer exigencias o arrancar decisiones. Con este proyecto, la misma pena se aplicará cuando el encierro o detención se prolongue por más de 48 hrs.
La iniciativa, que pasó ahora a segundo trámite, incrementa la pena cuando a raíz del secuestro, la víctima sea objeto de homicidio, violación, castración o lesiones graves. En tal caso, la pena partirá en presidio perpetuo (y ya no en presidio mayor en su grado máximo) e irá hasta presidio perpetuo calificado.
Cabe mencionar que el presidio perpetuo simple permite que quien reciba la sanción postule a libertad condicional tras 20 años de estar privado de libertad. El calificado, en tanto, define que solo se podrá optar a beneficios cumplidos 40 años de cárcel efectivos.
Con este proyecto se busca desincentivar la comisión de secuestros. Junto a esto, espera servir de incentivo a la liberación de las personas secuestradas antes de que la privación de libertad exceda las 48 hrs. de duración, en razón del carácter disuasorio de la pena.
Debate
En la discusión se valoró la propuesta impulsada por el Gobierno. De igual modo, se relevaron los alcances y la necesidad de otros proyectos de la agenda de seguridad que se verán esta semana en la Cámara.
Particularmente, se destacaron las cifras que hablan de un aumento de este delito en los últimos años. Según especificó el Ejecutivo, en 2022, hubo un total de 574 casos policiales relacionados al secuestro. Respecto de 2021, el aumento en 2022 fue de un 79%; en comparación con 2019, fue de un 51%.
Entre las opiniones parlamentarias, se alertó que solo un aumento de penas no resolverá los problemas de seguridad. Así, el llamado fue a realizar diversas acciones en paralelo para acompañar este y otros cambios legales.
Una de las propuestas más recurrentes fue la de aumentar las dotaciones de carabineros, detectives y gendarmes. Asimismo, reformar y profesionalizar las instituciones policiales; y dotarlas de mejor equipamiento e infraestructura.
Otras ideas apuntaron a concretar más cárceles y segregar a las bandas criminales. De igual modo, avanzar en policía militar de frontera; y en fortalecer a la fiscalía, para la correcta aplicación de las leyes.
