Un aumento de la temperatura de 1°C puede multiplicar por diez el número de personas desplazadas, ya que es suficiente para que los pastos se sequen y el rendimiento de las cosechas cambie.
Es la conclusión de una nueva investigación dirigida por la Universidad de Oxford, que estudió los efectos de los conflictos, el clima y la sequía, en los desplazamientos forzosos en Somalia.
Según la investigación, una reducción típica de las precipitaciones de 50 mm al mes también puede hacer que se dupliquen los desplazamientos. Pero, revela, aunque el conflicto provoca desplazamientos importantes, el desplazamiento en sí no causa más conflictos
La doctora Lisa Thalheimer, autora principal del estudio e investigadora asociada del Instituto de Cambio Medioambiental y del equipo de Econometría Climática de Oxford, afirma en un comunicado: «La vida de los pastores y agricultores de Somalia se encuentra en el filo de la navaja. Incluso un aumento de 1°C respecto a las temperaturas normales -ya sea sostenido o que se repita con frecuencia a lo largo de unos meses- es suficiente para que los pastos se sequen y el rendimiento de las cosechas cambie.
Nuestra investigación muestra que estos cambios de temperatura aparentemente pequeños están teniendo un impacto desproporcionado y están obligando a las comunidades a abandonar sus hogares».
Y añade: «Según nuestra investigación sobre Somalia, se calcula que un calentamiento de 1 °C multiplicaría por diez los desplazamientos previstos. Es alarmante que, incluso este cambio marginal de temperatura, tenga un impacto tan enorme. Pone de relieve el efecto que el cambio climático puede tener en las zonas vulnerables de las tierras áridas africanas».
El autor del estudio Moritz Schwarz, de la Smith School of Enterprise and the Environment de Oxford, afirma que «estas regiones vulnerables ya están sufriendo los efectos del cambio climático y es probable que empeoren». (Europa Press)