INE publica Nota Técnica en torno al Censo Agropecuario y Forestal
Que analiza la tasa de no logro en la aplicación de ese instrumento.
El 28 de octubre pasado, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) junto a la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA) dieron a conocer los resultados del VIII Censo Nacional Agropecuario y Forestal, el cual es, por definición, «el pilar del sistema de estadísticas agropecuarias nacional, pues permite realizar una caracterización de la estructura productiva, dada la enumeración del universo de unidades que componen el sector y diseñar marcos muestrales, los cuales son la base de las encuestas intercensales».
En este contexto, las innovaciones metodológicas y el cambio conceptual son elementos cruciales para comprender las cifras que entregó este censo; pues supone un avance sustantivo respecto a los ejercicios previos en la materia, lo que se tradujo en una tasa de logro de 91,34% a nivel nacional.
La tasa de no logro
La tasa de no logro, por su parte, tiene un alcance operativo, pues corresponde principalmente a las situaciones donde hay una ausencia de informante, el potencial informante presente en el terreno no es el idóneo para responder el Censo, hay rechazo por parte del informante o algún otro motivo; y para su interpretación se requiere tener en cuenta los aspectos metodológicos de la operación censal.
En este sentido, al momento de la construcción del marco estadístico «no fue posible identificar la presencia o no de actividad silvoagropecuaria para el año de referencia 2020-2021, por ello las/los censistas debieron recorrer todo el territorio definido previamente para realizar la identificación visual y observar en terreno si la superficie contaba o no con actividad silvoagropecuaria», publicó el INE. En otras palabras, «el no logro, en términos absolutos, corresponde a superficie donde no fue posible determinar el uso del territorio, y por tanto no habría sido posible caracterizar la estructura productiva», añadió.
Los resultados del VIII Censo Nacional Agropecuario y Forestal
Como resultado, «se pudo determinar que, a nivel nacional, la superficie de no logro está compuesta en un 44% de matorral y pradera natural, por lo que, de acuerdo con la metodología, no correspondería aplicar un cuestionario en el caso de que esta superficie no se encuentre bajo gestión de un productor/a, es decir, dichas categorías de suelo son censadas solo cuando forman parte de los predios que conforman una Unidad Productiva Agropecuaria (UPA). Respecto a los bosques nativos estos representan un 34% del total de no logro categorizado, lo que es esperable considerando las dificultades operativas que significa identificar a un informante en ese tipo de superficies», concluyó el INE.
Es posible identificar mediante imágenes satelitales y mapas de cobertura «el 92,4% de indagaciones no logradas en terreno y, en ese universo, se observa que solamente el 5% está identificado como superficie de uso de cultivo y el 10% asociado a plantaciones forestales, lo que a su vez implica solo un 1,2% a nivel nacional. Por otra parte, el 76% de indagaciones no logradas en terreno están identificadas -por cobertura de suelo- como formaciones naturales y bosque nativo, lo cual respalda su categorización como no logro, debido a las dificultades operativas que significa identificar a un informante en ese tipo de lugares», finalizó.