Corte Suprema ordena estudiar impacto ambiental de proyecto inmobiliario en Peñalolén
La resolución plantea que presenta una evidente potencialidad de causar “riesgo para la salud de la población”.
La Tercera Sala de la Corte Suprema ordenó esta mañana someter a un estudio de impacto ambiental al proyecto inmobiliario de la empresa Crillón en Peñalolén al considerar que la sola declaración, presentada por el interesado, resulta «insuficiente”.
La decisión fue tomada por el ministro Sergio Muñoz, las ministras Adelita Ravanales, María Teresa Letelier y los abogados Diego Munita y Pedro Águila, siendo los últimos dos los únicos que votaron en contra.
“Presenta una evidente potencialidad de causar ‘riesgo para la salud de la población’, con lo cual se constituye en una clara e insoslayable amenaza para los grupos humanos que se encuentran en el área cercana”, plantea el dictamen frente a la liberación al medioambiente de MP10 (material particulado respirable) y NOx (óxido nitroso) en una concentración que supera los estándares establecidos como tolerables en la Resolución de Calificación Ambiental del Tribunal Ambiental.
El fallo explica, entre otras cosas, que la contaminación acústica estaría rebasando los límites máximos admisibles de ruido en las etapas constructivas.
Crillón, vinculado a la viña Cousiño-Macul, proyectó en 2018 utilizar 28 hectáreas del terreno donde se emplazaban los viñedos para construir mil 500 viviendas en 22 edificios de 7 pisos, otros seis de cuatro niveles y 250 casas. La inversión contempla un presupuesto de 300 millones de dólares y debería estar finalizada en 2026.