Washington confía en lograr liberación de Whelan porque tienen «cosas que los rusos quieren»

Whelan, que tiene pasaporte estadounidense, canadiense y británico, fue detenido en diciembre de 2018 en un hotel de Moscú por agentes del Servicio Federal de Seguridad (FSB).

Estados Unidos confía en poder lograr la liberación de Paul Whelan, un exmarine preso en Rusia desde hace cuatro años, ya que tienen «cosas que los rusos quieren», después de que Moscú no accediera esta semana a incluirle en el intercambio entre la jugadora de baloncesto Brittney Griner y el traficante de armas Viktor Bout.

Según un alto funcionario de la Administración Biden, están convencidos de que ambas partes llegarán a «un acuerdo mutuamente aceptable» si el Kremlin mantiene abiertas las negociaciones. En ese sentido, ha reiterado que fueron los rusos quienes echaron para atrás la propuesta de incluir a Whelan en el trato.

Esta misma fuente ha señalado que el acuerdo para intercambiar a la deportistas por el traficante de arma ha sido fruto del «compromiso» entre ambas y que continuarán «con este trabajo en el futuro», informa la CNN.

Una de estas «cosas» por las que podrían estar interesados en Moscú es el asesino ruso convicto en Alemania, Vadim Krasikov, cuya situación no descarta esta fuente de la Administración Biden que haya podido ser abordada en esta negociación.

En ese sentido, esta fuente sostiene que el presidente Biden tiene «voluntad» de «pagar un precio muy alto» en relación a este caso y puesto que Whelan está considerado un espía por el Kremlin, se les ha hecho saber que no descartan la posibilidad de ofrecerles un espía ruso como oferta para el intercambio.

Por otro lado, este funcionario ha confirmado que no se abordaron cuestiones relacionadas con la guerra de Ucrania durante aquella negociación y ha subrayado que Estados Unidos no hará concesiones en ese frente. «No nos corresponde a nosotros negociar cómo se resuelve esa horrible situación», ha dicho.

«El futuro de otro país no está para regatear», ha zanjado este alto funcionario, quien ha asegurado que la Casa Blanca tiene «nuevas formas de ofertas» que plantear a la parte rusa para intentar sacar a Whelan de allí.

Whelan, condenado por un tribunal ruso en 2020 a 16 años de cárcel por espionaje, habló este jueves con la CNN y afirmó que el presidente Joe Biden y su equipo «van a tener que mirar que es aquello que tienen valioso que estas personas quieren y, con suerte, dárselo», o estará «aquí por mucho tiempo».

Whelan, que tiene pasaporte estadounidense, canadiense y británico, fue detenido en diciembre de 2018 en un hotel de Moscú por agentes del Servicio Federal de Seguridad (FSB). Según la Inteligencia rusa, se le encontró un dispositivo de memoria externa que contenía información clasificada. (Europa Press)

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El Periodista