Irán condena a muerte a cinco manifestantes por muerte de policía durante protestas
El portavoz del Departamento de Justicia, ha detallado que la muerte del agente, Seyed Ruholá Ajamian, tuvo lugar el 21 de noviembre después de que los acusados le atacaran "con cuchillos" y le golpearan cuando se encontraba en el suelo.
Las autoridades iraníes han informado este martes de que cinco personas han sido condenadas a muerte por su implicación en el fallecimiento de un agente de seguridad en las protestas que desde hace varios meses vienen produciéndose en el país.
El portavoz del Departamento de Justicia, Masoud Setayeshi, ha contado que por ese mismo delito otras once personas, entre ellas tres menores de edad, han sido condenados a «largas penas» de prisión, según informa la agencia ISNA.
Setayeshi ha detallado que la muerte del agente, Seyed Ruholá Ajamian, tuvo lugar el 21 de noviembre después de que los acusados le atacaran «con cuchillos» y le golpearan cuando se encontraba en el suelo. Las condenas pueden todavía recurrirse ante el Tribunal Supremo, ha informado.
Desde el inicio de las protestas, Setayeshi ha asegurado que 1.200 manifestantes han sido ya puestos en libertad, mientras que «varios» ciudadanos extranjeros han sido arrestados y acusados de los delitos de «concierto para delinquir».
Durante su comparecencia, el portavoz de Justicia ha acusado a Estados Unidos de aprovechar los festejos por los partidos de la selección de Irán en el Mundial de Fútbol de Qatar para «lanzar numerosos golpes y motines para acabar con la democracia, espiar y matar a inocentes».
Mientras tanto, las protestas continúan en Irán. A mediados de septiembre comenzó esta nueva ola de manifestaciones en contra del Gobierno de Irán en respuesta a la muerte en dependencias policiales de la joven de origen kurdo Mahsa Amini, quien fue arrestada por supuestamente llevar mal puesto el velo.
Desde entonces, según organizaciones de Derechos Humanos locales e internacionales, unas 470 personas han muerto como consecuencia de la represión de las fuerzas seguridad del Estado, mientras que otras 18.000 han sido arrestadas. (Europa Press)