Italia aboga por nuevas «soluciones» tras su rechazo a los barcos de ONG
La llegada de la ultraderecha al Gobierno de Italia ha reavivado las críticas de Roma hacia las ONG que rescatan migrantes y refugiados en el Mediterráneo,
La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, ha defendido que las polémicas surgidas en los últimos días a cuenta del veto de su Gobierno a barcos de ONG evidencian que «las soluciones identificadas hasta ahora probablemente no son las mejores y son insuficientes», por lo que ha abogado por reabrir el debate dentro de la UE.
«Es mucho mejor colaborar que discutir», ha dicho Meloni en su comparecencia ante los medios tras la cumbre de líderes del G20, en la que se ha visto, entre otros dirigentes, con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, con quien ha tratado precisamente temas de inmigración.
La llegada de la ultraderecha al Gobierno de Italia ha reavivado las críticas de Roma hacia las ONG que rescatan migrantes y refugiados en el Mediterráneo, a las que acusa de fomentar indirectamente la labor de las mafias. El tema ha generado ya tensiones con otros países, en particular con Francia, que recibió la semana pasada a un barco, el ‘Ocean Viking’, con más de 200 migrantes a bordo.
El ministro del Interior italiano, Matteo Piantedosi, ha alegado este miércoles en el Senado que la «prioridad absoluta» de su Administración es «proteger la dignidad de las personas», pero al mismo tiempo ha advertido de que no se puede pedir más a un país que sólo este año ha registrado más de 90.000 llegadas a sus costas.
El objetivo, ha explicado, pasa por «gobernar» los flujos migratorios, no «sufrirlos», según informa la cadena Rai. En este sentido, no ha rechazado que Italia pueda acoger a quienes lo necesitan, pero ha abogado por combatir la inmigración irregular.
Asimismo, Piantedosi, miembro de la Liga de Matteo Salvini, ha afirmado que el ‘Ocean Viking’ no llegó a entrar en aguas italianas y que la responsabilidad en este caso recaía en Libia o Malta, por su cercanía, o en el país de bandera de la embarcación.
«Necesitamos una nueva política europea verdaderamente basada en el principio de solidaridad», ha reclamado el ministro, que ha llamado también a poner el foco en el norte de África para contribuir al desarrollo y combatir a las redes que trafican con personas.
Más de 20.000 personas han perdido la vida en aguas del Mediterráneo central desde el año 2014, entre ellas al menos 1.365 sólo este año, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). (Europa Press)