Periodistas de CNN detenidos por su cobertura de matanza en guardería abandonan Tailandia
Las fuerzas de seguridad han insistido en que su presencia en el lugar de los hechos podría haber "contaminado pruebas", lo que obstaculizaría el trabajo de los investigadores.
Los dos periodistas de la cadena de televisión estadounidense CNN que fueron detenidos por la Policía de Tailandia acusados de violar la escena de la matanza que tuvo lugar la semana pasada en una guardería y que se saldó con más de una veintena de niños muertos han abandonado este lunes el país.
Su salida ha tenido lugar después de que las fuerzas de seguridad los pusieran en libertad tras retirarle los visados de turistas otorgados a ambos, según informaciones del diario ‘Bangkok Post’.
Así, los dos reporteros, identificados como Anna Coren y Daniel Hodge, se han dirigido al aeropuerto de Suvarnabhumi para coger un vuelo con destino Hong Kong. Inmigración había revocado previamente sus visados después de que las autoridades criticaran su cobertura de la matanza en la guardería por introducirse precisamente en el centro educativo.
El jefe de la Policía tailandesa, el general Damrongsak Kittiprapas, ha señalado que tanto Coren como Hodge han sido además multados con 5.000 bahts (unos 136 euros) cada uno por violar sus visados de turista.
Los periodistas habían grabado imágenes del interior de la guardería, lo que ha levantado la polémica en el país, especialmente por parte de los familiares de las víctimas, que los han acusado de vulnerar la ética periodística.
La Policía, por su parte, ha explicado que los medios de comunicación no tenían permiso para acceder al lugar del crimen, algo que ha sido discutido por los periodistas, que aseguran que contaban con el permiso correspondiente pero se han disculpado por lo sucedido.
Las fuerzas de seguridad han insistido en que su presencia en el lugar de los hechos podría haber «contaminado pruebas», lo que obstaculizaría el trabajo de los investigadores. En este sentido, no descarta que se imputen otros cargos en su contra. (Europa Press)