Argentina pide a Qatar detención del vicepresidente iraní Mohsen Rezai por atentado a la AMIA

Rezai era comandante de la Guardia Revolucionaria en el momento del atentado.

El Gobierno argentino ha solicitado este lunes a Qatar la detención del vicepresidente de Asuntos Económicos de Irán, Mohsen Rezai, por su presunta implicación en el atentado de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en Buenos Aires, en el que murieron 85 personas en 1994.

El ministro de Relaciones Exteriores argentino, Santiago Cafiero, habría remitido un escrito a Qatar recordado que sobre Rezai pesa una orden internacional de detención, según fuentes consultadas por el diario argentino ‘La Nación’.

El mensaje fue remitido tras un aviso del fiscal Sebastián Basso, titular de la Fiscalía AMIA, quien le advirtió de la presencia de Rezai en Qatar desde la noche del domingo.

Basso pidió a la Cancillería que «se activen los mecanismos diplomáticos y de política exterior que estimen corresponda para dar cumplimiento con la orden judicial de captura de Rezai, sobre quien pesa alerta roja emitida por Interpol por su presunta participación en el atentado contra la AMIA y quien, conforme surge de distintas páginas en Internet viajó al Estado de Qatar».

Rezai está en Doha, capital de Qatar, para participar en una exhibición de empresas iraníes antes de la Copa del Mundo de fútbol. También viajó para seguir de cerca los acuerdos alcanzados entre altos funcionarios iraníes y qataríes. A su llegada, Rezai fue recibido por el viceministro de Relaciones Exteriores de Qatar y el embajador de Irán en Doha.

Sobre Mohsen Rezai, pesa una alerta roja emitida por Interpol por su presunta participación en el atentado contra la AMIA, con una orden de captura internacional dispuesto por el exjuez del caso Rodolfo Canicoba Corral el 9 de noviembre de 2006. Rezai era comandante de la Guardia Revolucionaria en el momento del atentado.

En enero Rezai ya estuvo en Nicaragua en un acto oficial, donde estaba el embajador argentino en ese país, Daniel Capitanich, y no fue detenido por el gobierno de Daniel Ortega, que lo invitó a la asunción de un nuevo mandato como presidente de ese país. Tras el viaje, la Argentina condenó la presencia del prófugo en Managua. (Europa Press)

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El Periodista