Chile: Mejorar la productividad y la protección social, así como aumentar los ingresos tributarios para lograr una recuperación sostenible, afirma la OCDE
La recuperación de Chile tras la crisis del COVID-19 ha sido impresionante, pero la pandemia obstaculizó los avances anteriores de reducción de la pobreza y las disparidades sociales.
Según un nuevo informe de la OCDE, Chile necesita reformas para aumentar la productividad, la protección social y los ingresos tributarios, y hacer frente a los desafíos de corto plazo como la elevada inflación.
El último Estudio Económico de Chile de la OCDE aplaude el avance en las importantes reformas que se están llevando a cabo desde principios de 2022, en particular la pensión garantizada universal y los planes para construir un sistema tributario más justo que pueda generar mayores ingresos. Según el Estudio, también deben priorizarse las medidas dirigidas a aumentar la productividad, mejorar la competitividad y conseguir que un mayor número de chilenos accedan a puestos de trabajo de calidad y mejorar la cobertura de la protección social.
«Chile está dando pasos importantes para fortalecer sus ingresos tributarios y cerrando brechas en la protección social», afirmó el Secretario General de la OCDE, Mathias Cormann, en la presentación del Estudio en Santiago junto con el Ministro de Hacienda, Mario Marcel. «Reformas complementarias para aumentar la productividad y la inversión contribuirían a un crecimiento más fuerte, y generar más empleos e ingresos adicionales para que Chile pueda invertir en un mayor progreso económico y social».
La solidez de las instituciones chilenas y la prudencia en la gestión de las finanzas públicas permitieron dar una fuerte respuesta fiscal a la pandemia y posibilitaron una recuperación vigorosa. La economía chilena creció un 11,9 % en 2021, superando con creces a los países de la OCDE y de la región. El Estudio prevé que el crecimiento se ralentice al 1,9 % en 2022, a medida que el crecimiento mundial se desacelera y la inflación, que se encuentra en su máximo nivel en 30 años, reduce el poder adquisitivo. Gracias a la rápida respuesta en materia de política monetaria, se debería volver al objetivo de inflación a principios de 2024.
Los ingresos tributarios de Chile, de sólo 21% como porcentaje del PIB, son muy bajos en relación con estándares internacionales, con cerca de un tercio de trabajadores con empleos informales y solo una quinta parte de los chilenos que paga el impuesto a la renta. El Estudio concluye que la reforma tributaria prevista va en la dirección correcta y acercaría la recaudación tributaria al promedio de América Latina y de la OCDE, que asciende al 28% y el 34%, respectivamente. Unos mayores ingresos tributarios contribuirían a fortalecer la resiliencia de las finanzas públicas y financiar las importantes crecientes demandas sociales.
Las perspectivas de crecimiento de Chile a más largo plazo dependerán de su capacidad para dar respuesta a los obstáculos estructurales al crecimiento, entre los que se incluyen la escasa competencia y los bajos niveles de inversión en investigación y desarrollo para promover la innovación.
Tras muchos años de convergencia, la brecha de productividad y de ingresos de Chile con respecto a las economías avanzadas se está ampliando nuevamente. El Estudio recomienda simplificar las regulaciones y los procedimientos de concesión de permisos cuya complejidad frena la inversión y la creación de nuevas empresas, aumentar la inversión en nuevas tecnologías y ampliar el acceso a una educación de alta calidad.
También hay margen para diversificar las exportaciones de Chile, aún dominada por el sector minero, y para mejorar la facilitación del comercio y la eficiencia de los procedimientos fronterizos.
Chile cuenta con uno de los sistemas de protección social más completos de América Latina, pero la pandemia ha puesto de manifiesto las deficiencias en la cobertura, especialmente para los trabajadores informales. La mejora de la cobertura de la protección social para todos, incluyendo vía las pensiones, el acceso a los servicios de salud y los programas de transferencias monetarias para combatir la pobreza, puede contribuir a reducir estas deficiencias. El Estudio recomienda aumentar los niveles de las pensiones y aplicar un sistema de cotizaciones progresiva, así como unificar los programas de transferencias monetarias para lograr una cobertura más amplia. Futuras reformas de las prestaciones sociales también deben tener especialmente en cuenta la forma en que afectan a los incentivos para la creación de empleo formal.
Chile está realizando avances significativos en materia de energía sostenible y las fuentes renovables representan ahora el 47% de la generación de electricidad, ya que la energía solar y la eólica han cobrado importancia. De cara al futuro, Chile tiene un potencial mucho mayor en la generación de energías renovables, que excede ampliamente las necesidades nacionales.
Consulte una sinopsis del Estudio, así como sus principales conclusiones, gráficos y resúmenes en inglés y español.