Académico brasileño asegura que cooperación con la OCS puede ser muy beneficiosa para América Latina

En una entrevista, Pedro Costa Junior,  profesor de relaciones internacionales de la Universidad de Campinas y Doctorando de la Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias Humanas  de la Universidad de Sao Paulo, aseguró que la OCS puede proporcionar seguridad a aquellos países latinoamericanos que fueron espiados por Estados Unidos en el escándalo de la NSI (Agencia Nacional de Seguridad), y ayudarles a proteger sus fronteras de todo tipo de crímenes.

«Desde el punto de vista geopolítico, tras los escándalos de espionaje revelados por la NSI, el caso Snowden, y la Wikileaks de Julian Assange, quedó claro que es necesaria una cooperación de seguridad informacional. Es necesaria una cooperación internacional para proteger la soberanía de los Estados, y esta es una de las preocupaciones de la OCS que atiende demandas de países sudamericanos que fueron espiados en los escándalos de la NSI.»
Para el experto brasileño, la OCS, fundada en 1996, también podría ayudar a América Latina en otros aspectos muy importantes.

«Interesan las otras demandas, que tienen que ver con la protección de fronteras, la cuestión de defensas ambientales, la Amazonia es un territorio extenso que abarca varios países de Sudamérica, Brasil tiene el mayor territorio, y tuvo un aumento brutal de su devastación y exploración, minería, quemadas… es necesario un control más fuerte, controlar las fronteras, la cuestión del trafico de armas, el aumento de la violencia».

Pedro Costa Junior explicó que a diferencia de la OTAN y las organizaciones dominadas por Estados Unidos, la OCS tiene un sentido más geopolítico que geoeconómico.

«Cuando vemos los principios de la OCS, los tres primeros dicen sobre cuestiones políticas, energéticas y de cooperación estratégica, como de fronteras, intercambio de informaciones para combatir el narcotráfico, el terrorismo, cuestiones de combate a las drogas y armas, pero el gran logro fue unir todos estos países, del sudeste asiático, de la Europa oriental…de Euroasia».

El especialista brasileño recalcó que organizaciones como la OCS muestran que el poder en el mundo de Washington está acabando y que, ahora, quien comanda es Beijing.

«Otro punto importante es que este grupo entra en un contexto mayor que es el contexto de Washington de los años 90 es contestado, acabó. Lo que vemos hoy es el contexto de Beijing, que engloba varias organizaciones, las nuevas rutas de la seda, con más de 140 países, la OCS, los BRICS, los países que cooperan para la OCS en Asia… China nos muestra hasta ahora en relaciones exteriores un respeto a la soberanía de los Estados, la soberanía y las elecciones internas, la llamada autodeterminación de los pueblos. En este punto de vista es interesante este tipo de cooperación para nosotros aquí».

Fuente (autorizada) CGTN Español (China)