Lula busca establecer una relación de «respeto» con las Fuerzas Armadas de Brasil
Lula también ha defendido que seguirá haciendo campaña en la calle y ha asegurado que la misma "debe ser adoptada por los simpatizantes".
El expresidente y candidato a las próximas elecciones presidenciales de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha defendido este viernes una relación de «respeto» con las Fuerzas Armadas brasileñas si gana los comicios.
«Yo nunca he tenido ningún problema con las Fuerzas Armadas porque las Fuerzas Armadas tienen sus funciones establecidas en la Constitución. Las Fuerzas Armadas nunca preguntan el por qué de la decisión de un presidente, simplemente las cumplen», ha espetado Lula da Silva en una convención del Partido Socialista Brasileño celebrada en Brasilia, ha informado ‘Correio do Povo’.
Lula da Silva ha sostenido su apuesta por establecer una relación de respeto en la que «cada uno cumpla con su rol», y en la que el presidente no trate a las Fuerzas Armadas «como si fueran un objeto en su mano», aludiendo al uso que el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, hace de los militares, cuestionando la fiabilidad del sistema electoral.
En este sentido, el candidato presidencial ha criticado a su oponente por cuestionar el sistema de voto electrónico sin pruebas. «Quien alegue fraude tiene que probarlo, y quien no lo pruebe tiene que ser castigado por la farsa de acusar. Bolsonaro que se vaya por todo el daño que ha causado al país», ha declarado, según ha recogido el diario ‘Globo.com’.
Lula también ha defendido que seguirá haciendo campaña en la calle y ha asegurado que la misma «debe ser adoptada por los simpatizantes». El Partido de los Trabajadores había recomendado al expresidente evitar directamente al público «por razones de seguridad» por la polarización que está viviendo el país.
Para las elecciones presidenciales de Brasil, que tendrán lugar el próximo 2 de octubre, Lula da Silva parte como favorito, tal y como marca la última encuesta de Datafolha, que le da un 34 por ciento en intención de voto a Bolsonaro, muy lejos del 57 por ciento que tendría el expresidente. (Europa Press)
