Blinken conversará con Lavrov y ofrecerá a Rusia intercambio de la deportista Griner
El encargado de la diplomacia estadounidense ha señalado que el Departamento de Estado ya cuenta con un plan detallado para lograr este proceso y ha compartido su esperanza para que Rusia acceda al intercambio.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha confirmado este miércoles que conversará «en los próximos días» con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, a quien ofrecerá el intercambio de la jugadora de baloncesto Brittney Griner.
Este será por tanto el primer acercamiento de ambos funcionarios desde el estallido de la guerra en Ucrania, iniciada a finales de febrero por orden del presidente ruso, Vladimir Putin, y supondrá un paso hacia la reapertura de los canales diplomáticos entre Moscú y Washington.
En declaraciones a los medios de comunicación, Blinken ha adelantado que entre los asuntos que abordará con su homólogo ruso será un posible intercambio mediante el cual la jugadora de baloncesto de la WNBA Brittney Griner y el exmarine estadounidense Paul Whelan, acusados por la Justicia rusa, regresen a suelo estadounidense.
El encargado de la diplomacia estadounidense ha señalado que el Departamento de Estado ya cuenta con un plan detallado para lograr este proceso y ha compartido su esperanza para que Rusia acceda al intercambio.
«Han sido detenidos por error y se les debe permitir volver a casa (…) pusimos una propuesta sustancial sobre la mesa hace semanas para facilitar su liberación», ha señalado Blinken, quien ha añadido que hará uso de la conversación con Lavrov para «hacer un seguimiento personal» de este asunto.
Cuestionado por el coste que supondría esta operación para Estados Unidos, Blinken ha reconocido que esta es precisamente la mayor incógnita a la que se enfrenta Washington, pues la Casa Blanca «no ve señales de que Rusia esté preparada para participar en una diplomacia significativa».
La jugadora estadounidense se declaró a principios de julio culpable por un delito de drogas ante un tribunal de Moscú, por lo que podría enfrentarse a una pena de prisión de hasta diez años de cárcel.
Por su parte, el exmarine estadounidense Paul Whelan está condenado por espionaje y la Justicia rusa ya ha rechazado en anteriores ocasiones las solicitudes de repatriación presentadas por su defensa. (Europa Press)