Rusia comienza operación para tomar Lisichansk, último bastión ucraniano en Lugansk
Durante las primeras horas del jueves el Ejército ruso había procedido a bombardear la cuenca oriental del paso del río entre ambas ciudades sin decidirse a avanzar.
El líder checheno, Ramzan Kadirov, ha anunciado este jueves el comienzo de la operación militar rusa para tomar la ciudad de Lisichansk, considerado como el último gran bastión de las fuerzas ucranianas en el territorio de Lugansk, en el este del país y considerado uno de los grandes objetivos del Kremlin en su invasión de Ucrania.
Kadirov, que ayer ya anunció la entrada de la primera avanzadilla militar en la ciudad, ha acompañado su mensaje en vídeo, publicado en su cuenta de Telegram y recogido por la agencia TASS, de imágenes con el material militar con el que cuentan sus fuerzas para completar la toma de la ciudad.
Lisichansk es la «ciudad hermana» de Severodonetsk, que cayó en manos de Rusia la semana pasada. Durante los últimos días las fuerzas ucranianas se han atrincherado en los pasos a través del río Donets, que se paran ambas localidades, pero han ido retrocediendo por el empuje de las fuerzas rusas.
En su mensaje de este jueves, Kadirov ha aprovechado para aplaudir los avances iniciales en la ciudad. «Hemos conseguido buenos resultados de momento. Hemos tomado muchos prisioneros y nos hemos incautado de muchas armas extranjeras», ha hecho saber.
Poco después, el portavoz militar de la autoproclamada República Popular de Lugansk, aliada de las fuerzas rusas, Andrei Marochko, ha confirmado que el Ejército ruso ya cruzado el río Donets y confirmado el comienzo de la ofensiva en el norte de la ciudad, recoge Interfax.
De hecho, en las últimas horas, el «embajador» en Rusia de Lugansk, Rodion Miroshnik, anunció la toma de la refinería de Lisichansk, considerada como una de las más grandes del país.
El gobernador ucraniano de Lugansk, Serhiy Haidai, se ha limitado a confirmar «ataques rusos» contra la refinería desde la pequeña población de Verjnokamyanka, unos pocos kilómetros al este de Lisichansk, lo que significaría, sumado a los ataques desde Severodonetsk, al oeste, que el cerco sobre Lisichansk se está estrechando.
«Los saboteadores no paran de intentar entrar en la ciudad y ahora mismo es imposible saber cuántas víctimas hay», ha declarado Gaidai a través de un mensaje en Telegram recogido por el portal de noticias ucraniano News of Lugansk. «Es caos y destrucción, y nos hemos quedado sin infraestructura», ha añadido.
Durante las primeras horas del jueves el Ejército ruso había procedido a bombardear la cuenca oriental del paso del río entre ambas ciudades sin decidirse a avanzar. Sin embargo, brigadas de ingenieros rusos se han desplazado ya a la disputada localidad de Serebryanka (también al este de Lisishank) con la intención de instalar puentes portátiles para cruzar el río por allí, estrechando así todavía más el cerco sobre la ciudad. (Europa Press)