Secretario general de ONU señala que civiles pagan el precio más alto de la guerra
Guterres ha visitado este lunes Moldavia, en una "misión de solidaridad y gratitud" para reconocer la generosidad de ese país, que ha recibido a cerca de medio millón de refugiados ucranianos.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha condenado el ataque ejecutado el sábado contra una escuela en la provincia ucraniana de Lugansk (este) y ha resaltado que es una muestra de que «los civiles pagan el precio más alto» de la guerra.
«El secretario general está horrorizado por el ataque del 7 de mayo que alcanzó una escuela en Belogorovka, en Ucrania, donde mucha gente aparentemente buscaba refugio ante los combates», ha dicho el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric.
«Este ataque es otro recordatorio de que en esta guerra, como en muchos otros conflictos, son los civiles los que pagan el precio más alto», ha señalado, antes de reiterar que «civiles e infraestructura civil deben estar a salvo en momentos de guerra».
Asimismo, ha indicado que «esta guerra debe terminar y debe establecerse la paz, en línea con la Carta de la ONU y el Derecho Internacional». «Naciones Unidas y sus socios humanitarios en Ucrania seguirán apoyando a aquellos cuyas vidas han sido rotas por la guerra», ha zanjado.
Guterres ha visitado este lunes Moldavia, en una «misión de solidaridad y gratitud» para reconocer la generosidad de ese país, que ha recibido a cerca de medio millón de refugiados ucranianos.
«Moldavia es el más frágil de los vecinos de Ucrania y es, con mucho, el país que ha recibido más refugiados en proporción con su población», ha advertido Guterres. Además, al no ser parte de la Unión Europea, Moldavia no recibe ninguno de los beneficios que otorga ese bloque, por lo que «necesita y merece un apoyo masivo, incluido apoyo presupuestario, para mantener su generosidad y preservar la estabilidad».
Además, Guterres ha alertado de que las consecuencias de una escalada «son demasiado aterradoras como para contemplarlas». «Estoy extremadamente preocupado por la continuación y posible extensión de la guerra que Rusia está librando en Ucrania, y por el impacto que está teniendo no sólo en la región sino en todo el mundo», ha subrayado, y una vez más, ha insistido en que se debe poner fin a la guerra: «Las armas deben callar».
El gobernador civil-militar de la región, Sergei Gaidai, ha afirmado que al menos 62 personas han muerto en el ataque aéreo ruso sobre el colegio de Belogorovka, que provocó un incendio en el centro educativo y en la Casa de la Cultura de la localidad, según recoge la agencia de noticias ucraniana Ukrinform.
Por otra parte, Guterres ha aplaudido la llegada a Zaporiyia de más de 170 civiles evacuados de la acería de Azovstal y otras zonas de Mariúpol, tras una operación coordinada por Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
«Mis pensamientos están con ellos y con toda la gente de Ucrania que sufre a causa de esta guerra», ha dicho, antes de dar las gracias a «todos los involucrados en esta compleja operación, incluidos los líderes en Kiev y Moscú por garantizar las pausas humanitarias necesarias».
En este sentido, ha resaltado que esta operación «eleva a más de 600 el número de civiles que han sido evacuados de forma segura de Azovstal y otras zonas de Mariúpol». «Pido a las partes en conflicto que no escatimen esfuerzos para garantizar la evacuación segura de los que quieran irse, en la dirección que elijan, y para que la ayuda llegue a la gente que la necesita», ha remachado. (Europa Press)